Rocobra la naturalidad de tu rostro con los increíbles beneficios de esta materia prima.
Primero fueron los cítricos y luego la granada, pero esta vez es el algodón el que acapara todas las miradas del mundo de la cosmética. ¿Por qué? Entre sus cualidades se cuentan la mayor suavidad y elasticidad de la piel sensible, razón por la cual grandes marcas han comenzado a integrarlo en sus productos de belleza.
El algodón contiene siete oligosacáridos sinérgicos activos (azúcares) que mejoran la barrera protectora y reducen la apariencia rojiza de la piel; aumentando además la capacidad de producción de queratina.
Según cuenta la cosmetóloga Romina Miranda, el algodón calma las irritaciones ya existentes y hace que la piel no tenga un efecto de brillo. “Es ideal para pieles ultrasensibles y reactivas, con venas dilatadas o rosácea”, explica la especialista.
El primer paso para cuidar la piel, es conocer los agentes nocivos que producen su resequedad e intentar prevenir el contacto rutinario con ellos. Aquí, algunos para tener en cuenta:
– Alta exposición al calor y al frío
– Polución y alergias presentes en el ambiente
– Factores genéticos
– Estrés
Los productos de belleza en base a algodón son usados con frecuencia para cremas de cuerpo y rostro, pero en este último caso, su efecto es más potente debido a la delgadez de la piel de la cara, sin embargo, no hay de qué preocuparse ya que es un componente liviano que puede aplicarse diariamente sin contraindicaciones.
Otros compuestos milagrosos para considerar:
Arroz: ayuda a promover la protección de la piel
Eufrasia: hierba que contiene taninos, usados para disminuir inflamaciones especialmente alrededor de los ojos.
Aloe Vera: planta conocido por sus propiedades calmantes.
Genepi Blanco: hierba de aroma perfumada ampliamente conocida en el mundo de la cosmética por sus propiedades anti-inflamatorias.
Té blanco: Posee muchos más polifenoles y radicales libres que el té verde, los cuales ocasionan retraso del envejecimiento.
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