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Día mundial de la hipertensión: La importancia de un tratamiento controlado

Este sábado se celebra el Día Mundial de la Hipertensión. Aquí te explicamos los síntomas de esta enfermedad y los tratamientos que debemos seguir.

Por Josefa Cajas/ @josefacajas

La hipertensión es una enfermedad que se debe tratar a tiempo, ya que tiene complicaciones graves que pueden resultar en la muerte. Por ello, es recomendable realizarnos chequeos anuales a partir de los 30 años, sobre todo si tenemos antecedentes familiares.

Hablamos con el cardiólogo de la Clínica Bicentenario, Emilio Borquez, quien nos explicó cómo se siente una persona que sufre hipertensión y a qué se arriesgan si no se controlan a tiempo.

El cardiólogo nos explicó que los síntomas iniciales de la hipertensión “aluden a dolores de cabeza, malestares generales y decaimiento”. Además, puede sufrir desánimos y en algunas ocasiones sangramiento nasal.

Un 90% de los casos de hipertensión corresponde a un origen desconocido y con alta carga genética y el 10% restante responde a causas secundarias como problemas renales o endocrinólogos.

El médico nos indicó a que “si los padres son hipertensos, lo más probable es que los hijos también lo sean. Por lo que se debe considerar que es el principal factor modificable en la enfermedad cerebrovascular”.

Tratamiento: Cambios de hábitos

Los pacientes hipertensos hacen trabajar a su corazón de manera más intensa, lo que se traduce en un mayor riesgo de infarto y accidentes vasculares.

El cardiólogo nos explica que debe haber “un tratamiento que contemple cambios de hábitos, como dejar de fumar, reducir el consumo de sal, practicar ejercicios y mantener un peso adecuado”.

En el caso que estas medidas no lograran controlar la enfermedad, se debe hacer un tratamiento farmacológico que contemple algunos medicamentos.

El especialista asegura que “si el paciente tampoco logra controlar su hipertensión a través de los fármacos, se puede realizar una ablación arterial, es decir, un  procedimiento en el que se queman unos puntos a nivel de las arterias renales”.

Abandonar el tratamiento desencadena en una hipertensión mal controlada y ésta puede derivar en descompensaciones de la presión arterial, generando mayor riesgo de infartos y accidentes vasculares.

Por último, independiente de si está o no controlada la presión, todo hipertenso debe visitar al menos, dos veces al año, a un especialista. El cardiólogo, agrega que “también deben asegurarse que el tratamiento esté controlado y ser estricto en la dieta y en los hábitos alimenticios”.

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