Sigue la presentación de colecciones ready to wear en París. Ya vimos la propuesta de Chanel y de Saint Laurent, y ahora es el turno de repasar lo que fue la colección de Valentino, donde el patchwork y las flores en tonos oscuros se tomaron la pasarela de la casa de moda italiana.
El patchwork consiste en una técnica que une distintas telas y materiales para formar una tela más global. Usando tonos otoñales como el naranjo, el verde y el azul, Valentino presentó esta técnica en vestidos, poleras y hasta en botas, dando cuenta de lo que, seguramente, será una tendencia internacional en los próximos meses.
Un infaltable en la colección es el vestido en tono “rojo Valentino”, el cual ya se ha convertido en un clásico para la marca, desde sus mismos comienzos. Las capas con estampados también caminaron con fuerza sobre la pasarela, convirtiéndose en uno de los looks más comentados.
Las flores llegaron bordadas y estampadas, en transparencias y sobre géneros opacos y más brillantes. La tendencia en la pasarela, eso sí, estuvo en los cuellos en punta y en los cortes a la cintura, para definir la silueta.
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