Con el actual estilo de vida, las personas por lo general no le prestan atención a la forma en que comen y los efectos negativos que puede traer para el organismo hacerlo de una forma poco saludable o incorrecta.
Si lo que buscas es bajar de peso o simplemente mantener un cuerpo saludable, Paulina Hernández, nutricionista y jefa del programa ‘Vivir Bien’ de Sodexo, nos presenta a continuación los malos hábitos en los que más incurren las personas y cómo dejarlos de lado en nuestra rutina diaria.
Imagen: Gentileza Pixabay
Un estilo de vida
Antes de mencionar lo que debes dejar de lado, la especialista en nutrición dice que “mantener buenos hábitos alimenticios es fundamental, ya que a través de la alimentación se obtiene la energía necesaria para mantener el cuerpo sano y fuerte. Por esta razón, es importante no comer por comer, sino que estar consciente de los alimentos que se necesitan según la edad y el sexo”.
Mantener hábitos alimenticios adecuados es un trabajo que se debe realizar día a día, y no sólo en una temporada específica del año para bajar un par de kilos. “Comer sano y realizar actividad física colaborará a tener una mejor calidad de vida. No se trata sólo de verse bien, sino de sentirse bien también”.
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Paulina agrega que “lo que las personas tienen que considerar es que mantener buenos hábitos es algo simple, que se debe enseñar a los niños desde pequeños. Y lo más importante es contar con una alimentación equilibrada que contemple alimentos de todos los grupos: frutas y verduras, cereales y carnes”.
Ocho hábitos alimenticios que debes evitar
Atracones
Generalmente ocurren después de haberse saltado alguna de las comidas por un tiempo largo o responden a estados emocionales específicos. “Lo ideal es ordenar la ingesta de alimentos cada tres a cuatro horas máximo y conectarse con las emociones, no esconderlas comiendo”, explica la experta en nutrición.
Comer muy rápido
Al cerebro le toma, aproximadamente, 20 minutos percibir la sensación de saciedad, por lo que comer rápido sólo provocará hacerlo en exceso. Hay que comer de manera tranquila, sin distracciones y masticando bien cada alimento.
Comer frente a la televisión
Esta distracción provoca que comamos más de lo que necesitamos, debido a que no ponemos atención a la sensación de saciedad, ni a la cantidad de alimentos que estamos consumiendo.
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Comer lo primero que se encuentra
Se debe poner atención a lo que se come, ya que lo que elegimos a la rápida puede tener altos niveles de grasas y azúcares. Es recomendable siempre tener a la mano frutas o pequeñas porciones de frutos secos.
Pasar hambre
Saltarse las comidas puede causar problemas en el metabolismo y provoca ansiedad, trastornos de atracón y aumenta el riesgo de diabetes. Además, este mal hábito genera personas menos productivas y atentas en lo que están haciendo.
Comer postres diariamente
Los postres suelen tener mucha azúcar y pocos nutrientes, por lo que se pueden consumir de manera esporádica, y ojala para ocasiones especiales. Se debe considerar a diario postres de fruta fresca.
No beber suficiente agua
El agua mantiene el cuerpo hidratado. Se recomienda beber entre ocho y diez vasos diarios.
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Saltarse el desayuno
“Más del 10% de las personas no desayuna, lo que es un error, pues la primera comida del día es la que entrega la energía necesaria para iniciar las actividades con alto rendimiento y mantiene el metabolismo activo”, concluye Paulina.
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