La encontramos en un evento de la marca Guess, hasta donde llegó como una de sus embajadoras. Josefina Fiebelkorn se lució con un sencillo outfit de jeans y polera, que dejó claro su gusto por la moda.
“A mí me gusta la ropa, siempre me ha gustado”, dice sobre su relación con el mundo fashionista, agregando que “me atrae la expresión a través de la moda, jugar, desde lo más creativo”.
Sin embargo, más allá de ser una de las mejores vestidas del año, el 2017 fue un año de crecimiento para la actriz. Y también de destape, ya que un desnudo en la teleserie “Dime quién Fue” de TVN dio mucho que hablar en las redes.
“Pensé que ya habíamos superado eso de los desnudos, pero no. Me causó impresión que fuera tan impactante, sobre todo en días donde hemos visto mucho más por televisión”, reveló.
No es fácil sacarse la ropa en pantalla… ¿tienes algún rollo con eso, con tu cuerpo?
Mira, al principio tenía más rollos con mi cuerpo. Es que antes eran brígidos los estándares de belleza, con minas ultraflacas. Además, no es lo mismo con ropa que sin ropa, porque con ropa te puedes ver muy bien, pero si te la sacas tienes que estar apretada, sin celulitis.
¿Cómo lo superaste?
La verdad es que me di cuenta de algunas cosas, por ejemplo que mientras más segura está una mujer con su cuerpo más bella se ve, sin importar que tenga un rollito o que no sea perfecta.
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Pero las mujeres, en general, somos bien críticas…
Sí, claro. Somos las minas las que nos fijamos en las minas, nos criticamos la ropa, el cuerpo. Todas tenemos una ambición publicitaria del cuerpo. Pero yo ya abandoné las dietas extremas y ahora me estoy alimentando bien, haciendo deporte. Prefiero eso que estar muerta de hambre, famélica, sintiéndome mal.
¿Y antes cómo te sentías?
Uf, siempre he sido súper exigente conmigo y me he machacado mucho, súper castigadora. Y de a poco me he dado cuenta que no puedo vivir toda la vida así, machacándome. Se me va a convertir en un tumor, un cáncer o algo. No puede ser que este todo el tiempo juzgándome. Por eso, le he tratado de poner freno, porque no voy a pasar toda la vida deprimida, chata, haciendo dietas para sufrir.
Es una súper lección…
Sí. Y ahora he tratado de estar conforme conmigo misma, decir esto es lo que hay, quizás en veinte años no va a estar esto. Y si no lo sé disfrutar hoy día, que tengo 28 años, no lo voy a hacer a los 50. Por eso ya he dicho mis muslos son así, mi caderas son así, soy así no más, chao. Las mujeres se tienen que empoderar de lo que tienen.
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