Muchas madres y padres se preocupan cuando sus hijos no logran dormir solos en sus habitaciones. Sin embargo, debes tener en cuenta que dormir es una rutina más para el niño y que no será suficiente con pedirle que se cambie.
Por esto, el psicólogo educativo, Borja Quicios publicó en Guía Infantil algunas recomendaciones para que ayudes a tu hijo a que comience a descansar en su pieza.
Imagen: Gentileza Freepik.com
Cómo ayudar al niño a dormir en su habitación
– Intenta explicarle que durmiendo en su habitación tendrá más espacio y estará más a gusto. Este espacio será suyo y por eso podrá elegir como será.
– Coméntale que podrá hacer cosas que no puede hacer en la cama y pieza de los padres. Además, intenta leerle un rato antes de apagar la luz, meter cualquier juguete, etc.
– Si está preparado, utiliza un sistema de incentivos que se aplica alrededor de los 6 años, es decir, un sistema de motivación extrínseca basada en el reforzamiento positivo. O sea, cuando las emociones, tanto placenteras, como desagradables pueden ser generadas por la recompensa recibida después de realizada una acción. Para aplicar este incentivo, deben establecer en conjunto el premio por realizar la conducta deseada.
A partir de los 2 años es común que se produzcan regresiones en los niños, las que pueden tener diferentes motivos: desde el nacimiento de un hermano, hasta el miedo a dormir solos. Y es que a esta edad son frecuentes las pesadillas debido a su imaginación y el miedo a la oscuridad. Estos factores intensifican el miedo a dormir solos y les provocan un mal rato, pero se puede mejorar y esta guía te cuenta cómo.
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Recomendaciones para espantar los miedos
– Dejar una luz indirecta para ver que sigue en su habitación. Es decir dejar la puerta entreabierta para que le dé la luz del pasillo, o dejar la persiana medio subida.
– Mantener la rutina de acostarlo a la misma hora y hacer siempre lo mismo. Por ejemplo, leerle un cuento, darle un beso y las buenas noches.
– Si se despierta intranquilo, acompañarle hasta que se relaje.
– Jamás dejarlos solo y llorar hasta que se cansen. Esto solo generará más miedo y afectará su desarrollo.
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