Ir por la vida de sabelotodo sexual o de galán que se involucra con todas es un arma de doble filo. Si bien, a muchos les puede llamar la atención los relatos picantes que puedes contarles, a otros puede que esto los aleje por completo de tu lado.
Es que mientras a algunos galanes puede gustarles que seas abierta y reveles tu pasado amoroso sin problemas, otros pueden sentirse intimidados y celosos, por lo que no sería un buen arma de conquista. Algo que también pasa con nosotras, ya que a muchas no nos gusta saber qué aventuras tuvieron nuestros novios antes de conocernos.
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Sandra Lustgarten, psicóloga y sexóloga, señala en el sitio El Clarín que “lo que comienza como un juego a veces tiene consecuencias indeseadas”, agregando que preguntas del tipo “¿Quién tuvo la experiencia más sexual osada?” o “¿Quién ha tenido un trío?” causarían más problemas que beneficios. “La pregunta ¿alguien te ha hecho mejor que yo el sexo oral?, por ejemplo, suele ser una de las respuestas que más divorcios provoca”, afirma.
Machistas e inseguros
Así que, si quieres sorprender a tu nueva conquista con tus hazañas sexuales, o definitivamente no puedes callarte pensando que quizá de esta forma él se motivará a replicarlas, cuidado. No a todos los hombres les gusta escuchar ese tipo de proezas, ya sea por machismo o porque sienten “impotencia cuando se enteran que una mujer ha tenido varias parejas”, dice la especialista.
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Es que odian la competencia. “No hay hombre que se resista a creer que él es mejor que el otro”, comenta Sandra, agregando que estas confesiones terminan afectando “su manera de hacer el amor, ya que los celos les impiden aceptar que su mujer ha sido de otro”.
Por eso, la experta del diario El Clarín aconseja que “hay anécdotas que solo sirven para narrar a las amigas, para consultarles, o para buscar maneras de mejorarlas. En la pareja, es de rigor que abrir la intimidad pasada femenina solo provoca distancia, complejos, dudas e insatisfacción”.
¿Voyerismo y morbo?
La sexóloga señala que, pese a que a muchos chicos no les parece la revelación de las hazañas sexuales de su pareja, existen algunos a los que estas narraciones sí los motivan.
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“Tuve una pareja de pacientes en la que mujer siempre estaba comparándolo con otros hombres que la tocaban o estimulaban de otra manera. Lejos de alejarlo, que su mujer fuera de otro incentivaba al varón. ¿Perversión? ¿Voyerismo y exhibicionismo?”, se pregunta Lustgarten.
Por eso, si quieres revelarle todo tu pasado sexual a tu nuevo novio ten en cuenta que, al hacerlo, estarás “exhibiendo tu intimidad para despertar morbo o deseo”, indica la psiquiatra. Y eso, puede tener consecuencias tanto negativas como también que a tu hombre pueda interesarle como una forma de jugar y fantasear con lo que hiciste antes de que él existiera en tu vida.
Cuando ellos cuentan
Pero, ¿qué pasa cuando son los hombres los que revelan más de la cuenta? Sandra confiesa a El Clarín que “muchos creen que de esta manera denotan su experiencia sexual, se ven más viriles y muestran cómo son de deseados. Sin embargo, la mayoría de las mujeres reniegan de saber”.
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Las consecuencias más letales de tanta confesión son los celos, pero también la pérdida de deseo y la distancia que provocan esos “fantasmas” en el presente.
Para que esto no suceda, la especialista aconseja que lo mejor es “jugar en pareja sin herir susceptibilidades, sin abrir nuestra intimidad pasada a quien lo tomará como una provocación. Por eso, cuanto menos sepa el otro de nuestro pasado, mejor”, redondeando que “lo que se guarda como secreto de la vida pasada va a permitir vivir el presente y estimular desde lo que puede guiar mutuamente, buscando así otras alternativas para la seducción, o para ser mirados y deseados”.
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