Como en ningún otro país de Latinoamérica, los chilenos nos tomamos 11 días de descanso fuera de la casa. Esta es una de esas estadísticas que ayudan a mirar el lado bueno de la vida, sobre todo por estos días: en el contexto latinoamericano, Chile es el país en donde más tiempo de vacaciones se pasa fuera de la casa. En otras palabras, según el estudio Flujos de la Demanda de Turismo Interno-Verano 2010– realizado por la consultora Iccom y Sernatur, la duración promedio del viaje de vacaciones de verano de los chilenos es de 9,5 noches.
¿Poco? Todo lo contrario. Bastante si tiene en cuenta que, por ejemplo, en Argentina el promedio es de 7,5 noches; en Ecuador, siete noches; Paraguay, cinco; México, 4,4 y Perú, seis noches, de acuerdo a la información publicada por las respectivas secretarías y ministerios de turismo de esos países.
Claro que hay una gran diferencia entre ambos países. Mientras Chile tiene 15 días hábiles de descanso al año (al igual que países como Bolivia y Ecuador), Brasil es el país con más vacaciones legales en América Latina: 30 días si el trabajador tiene menos de cinco ausencias al año, según un informe de la consultora Mercer.
Cuestión de horas
Comparando con otros lugares de Latinoamérica, Santiago aparece como la segunda ciudad en donde más horas se trabajan al año (2.195), después de Ciudad de México (2.260), según el informe Prices and Earnings, de Unión de Bancos Suizos (UBS) 2009.
La explicación para entender por qué Chile lidera en esta materia la dan los especialistas, quienes coinciden en que los días de descanso de los chilenos han pasado de ser un lujo a una necesidad real.
Esto porque, comparando con otros lugares de Latinoamérica, Santiago aparece como la segunda ciudad en donde más horas se trabajan al año (2.195), después de Ciudad de México (2.260), según el informe Prices and Earnings, de Unión de Bancos Suizos (UBS) 2009. Brasil, en cambio, está por debajo del promedio mundial de horas trabajadas con 1.847 horas anuales en Río de Janeiro y 1.802 en Sao Paulo.
No es novedad que trabajamos mucho y la productividad es poca. Pero el hecho de que la cantidad de horas trabajadas en nuestro país sea superior al promedio mundial de 1.902 horas anuales y similar a los países asiáticos -con mayor horas laborales- hace de la recarga laboral una de las principales razones de por qué los chilenos veranean más.
Quizás por eso, también, la mayor motivación para realizar un viaje turístico en el verano de 2010 fue el esparcimiento y la recreación (77,4%), según el informe de Sernatur.
“Los estándares de exigencia en Chile, en el ámbito empresarial, son muy altos, quizás más que en otros países, y eso genera que al final del año, las vacaciones, más que para conocer, sean para descansar. Es una nueva necesidad de reconstitución sicofísica. En ese sentido, los chilenos privilegian el turismo dentro del mismo país, porque se caracteriza por ser un destino donde se instala y se recorre los alrededores; no es itinerante. Ideal para descansar”, dice Alejandro Capanegra, sociólogo argentino, coordinador del Programa de Investigación en Turismo y Sociedad de la U. de Buenos Aires.
La población estimada en el verano de 2010 que pasó sus vacaciones dentro de Chile fue de 5.435.015. Al exterior, en cambio, el número llegó a 660.283 personas.
Pero no todo pasa por la recarga que sienten quienes trabajan cuando termina el año. De acuerdo a Carlos Livacic, sociólogo de la Universidad Central, la mentalidad de la sociedad está cambiando. “La gente joven tiene mucho más emprendimiento. Al trabajar por su cuenta, manejan sus exigencias y entienden que es mejor tomarse las vacaciones de forma parcelada, como lo hacen los países desarrollados”, dice Livacic, aludiendo a que en los países europeos el tiempo promedio de estadía de veraneo es de 10 noches, según un informe de la feria de turismo World Travel Market.
Estos mismos jóvenes también han impulsado un cambio en el concepto de vacaciones. Un cambio de pensamiento respecto a la visión de lo que significa el receso. “Hoy en día hay una alta valorización del tiempo libre. Ahora se ve el trabajo como un elemento instrumental. Un medio para conseguir ingresos para poder obtener tiempo libre con la familia y los amigos. Los más jóvenes son quienes mejor manejan este concepto”, dice Carlos Catalán, sociólogo de la Universidad Adolfo Ibáñez. Pero esta valoración del tiempo ha llegado incluso a las entrevistas de trabajo.
Lo que se viene el 2011
Pero como nada es tan químicamente puro, hay otro factor que influye en que los chilenos lideren este ranking. La estabilidad económica y financiera, y un acceso a crédito superior a otros países de la región, permite que la población tenga más holgura para planear la estadía de su descanso.
Es por eso también que en los últimos dos años la cantidad de turistas chilenos dentro y fuera del país ha aumentado. Y la proyección para este 2011 es que esta tendencia siga en ascenso. Así, con respecto a 2009, Sernatur estima que habrá un alza de 5% de personas que se tomen vacaciones dentro del país y de 21% que opten por descansar fuera de nuestras fronteras. Es decir, por primera vez, este verano en las playas nacionales y extranjeras, muchos más chilenos disfrutarán sus casi 9,5 noches fuera de su casa.
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