Emma Stone estuvo hablando con el Dr. Harold S. Koplewicz para el Child Mind Institute, en una entrevista donde reveló su dura lucha contra los ataques de pánico y la ansiedad que la abrumaba hace unos años atrás.
Según cuentan en el sitio E! Entertainment, la actriz reveló que su primer ataque lo tuvo a los 7 años. “Después del primer grado, antes de comenzar el segundo grado, tuve mi primer ataque de pánico. Fue verdaderamente aterrador y abrumador”, contó Stone y añadió que “estaba en casa de una amiga, y de repente me convencí de que la casa se estaba incendiando y se iba a quemar. Estaba sentada en su cuarto, obviamente la casa no se estaba incendiando, pero no había ninguna parte de mí que no pensara que iba a morir”.
Durante los dos años siguientes, estos episodios siguieron. La actriz señaló que iba a la enfermería todos los días en el colegio y se hacía la enferma para que la mandaran a la casa. Es más, Stone dijo que “no podía ir a casa de amigas”, por culpa de estos ataques.
Luego de su primer ataque de pánico, la estrella de Hollywood comenzó a ir a terapia donde le diagnosticaron ansiedad generalizada y un trastorno de pánico. Lo que ella agradece el día de hoy, es que su terapista nunca le dijo de qué la habían diagnosticado, puesto que ir a terapia le daba “pena o vergüenza” y agregó que “estoy muy agradecida de no saber que tenía un trastorno (…) Quería ser actriz y no había muchos actores hablando de ataques de pánico”.
Stone reveló también que cuando estaba en terapia comenzó a escribir un libro titulado “Soy más que mi ansiedad” y eso la ayudó mucho porque ahí dibujaba.
Sobre este libro, la actriz comentó en 2016 en la revista Rolling Stone que “dibujé un pequeño monstruo verde en mi hombro que me hablaba al oído para decirme cosas que no eran verdad. Cada vez que lo escuchaba crecía. Si lo escuchaba lo suficiente me aplastaba. Pero si volteaba y seguía haciendo lo que estaba haciendo (dejando que me hablara pero sin prestarle la atención que pedía) se encogía y desaparecía”.
La protagonista de La la land, expresó que la actuación y la improvisación también la ayudaron mucho a superar sus miedos. La improvisación “es presencia, es meditativa” y dijo que la ansiedad a veces la ayuda en su actuación. “También creo que hay mucha empatía cuando se ha sufrido internamente. Hay una tendencia de entender cómo la gente alrededor de ti funciona o qué les sucede internamente. Eso es maravilloso para los personajes”, dijo, y aclaró que “no tienes que ser actor para superar la ansiedad, no tienes que ser escritor para superarla. Solo tienes que buscar dentro de ti lo que te atrae”.
A pesar de que estos ataques han disminuido, la actriz aún debe manejarlos cuando aparecen durante el día y contó que lo hace con la ayuda de un terapista, meditando y contactando a sus amigos y seres queridos cuando se siente más aislada.
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