Hace algunos días millones de infieles quedaron al descubierto luego que el grupo hacker The Impact Team, filtrara los datos de 37 millones de usuarios que el sitio de citas furtivas Ashley Madison guardaba bajo siete llaves.
Según publica La Tercera, tras la filtración se descubrió que Santiago figura como la quinta ciudad con más infieles del mundo, en un listado de 25 países que es liderado por las ciudades de Sao Paulo y Nueva York.
Y no es de extrañar, el exitoso programa Manos al Fuego de Chilevisión, nos da una muestra cada semana del descaro de quienes son puestos a prueba. Sin embargo lo que más llama la atención son las justificaciones que abren el debate a través de redes sociales, dejando en evidencia que para muchos la infidelidad tendría matices.
A raíz de esto, nos contactamos con Fernando Marchant, psicólogo de Centros Médicos Vidaintegra para entender este fenómeno que acecha a todo tipo de parejas.
CUÁNDO EXISTE INFIDELIDAD
Para muchos la respuesta a esta interrogante podría ser obvia. Pero lo cierto es que el significado de este concepto tiene matices y dependen de los códigos que tenga cada pareja.
Según el psicólogo la infidelidad ocurriría “cuando uno de los integrantes de la pareja rompe el compromiso de exclusividad, llegando a involucrarse sexualmente con otra persona”. Pero aclara que, “llegar a sentir una infidelidad, no sólo pasa por lo que cada uno piense en lo personal del concepto, si no también lo que significa para tu pareja”.
Fernando dice que debemos entender que, “desde una perspectiva biológica, los seres humanos responden a hormonas, olores, imágenes y sensaciones que son muy normales y que deben ser vistas como parte de un sin número de respuestas normales de nuestra sexualidad”. Pero advierte que “muy distinto es, llevar la relación a un terreno de mentiras, engaños y sufrimiento quebrantando el respeto y compromiso por la pareja”.
RADIOGRAFÍA A UN INFIEL
Según el sicólogo hay ciertas personalidades que tienden a ser más infieles que otras. “Las personas infieles son más buscadores de sensaciones, de espíritu libre, no les gusta el compromiso, se aburren pronto en una relación, muy cambiantes y quieren ser siempre jóvenes, no aceptan envejecer, de rasgos más egocéntricos e histriónicos”, explica.
Además agrega que, “una persona fiel, tiene más desarrollado su neocortex, piensa mejor, analiza mejor las consecuencias, una persona fiel, es más madura afectivamente, ve el bien común por sobre el individual, es capaz de consumar un vínculo desde el amor. Al contrario, una persona infiel es más buscador de placer, más visceral”, finaliza.
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