Muchas tenemos la mala costumbre de dejar el celular bajo la almohada después de verlo durante la noche.
Y esto no es todo, ya que otro elemento determinante es la intensidad de la luz. A mayor intensidad, más se intrrumpe el ciclo de secreción y con esto el ciclo circadiano, lo que provoca que la calidad del sueño baje, ya que nuestro cerebro no alcanza los niveles de relajación necesarios para dormir correctamente, tardando aproximadamente 45 minutos.
Dormir bien
No dormir bien puede provocarnos enfermedades neurológicas y metabólicas, aumentar las causas de cáncer, diabetes y depresión, entre muchas otras.
En este contexto y según el Instituto de Farmacología y Toxicología y Neurociencias de Atlanta, usar los móviles en la cama se asocia con no dormir bien, ya que necesitamos descansar bien para tener un mejor estado de salud y la luz emitida por este tipo de dispositivos no lo permite.
Pero esto no es todo, ya que un reciente estudio realizado por el Barcelona Institute for Global Health, reveló que utilizar el celular por la noche aumenta la incidencia del tiene cáncer de próstata y de mama.
Por su parte, las evidencias obtenidas por un equipo de investigadores de la Universidad de Toledo, Ohio, aseguraban que la luz azul podría dañar la vista y tener relación con la degeneración macular.
Recomendaciones
Es lógico que una de las recomendaciones es dejar de utilizar el celular antes de dormir. Sin embargo, existen otras opciones, como por ejemplo bajar el brillo y utilizar los sistemas “nocturnos” de los dispositivos móviles, que cambian a tonalidades rojizas.
Realizar un cambio es muy importante para la salud, tanto así que las investigaciones llevadas a cabo por Juan Antonio Madrid, uno de los mayores expertos en cronobiología del país, dicen que una luz adecuada puede ayudarnos a mantener el ritmo biológico en su sitio y, así, mejorar nuestra calidad de vida.
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