Uno de los alimentos principales en la cocina de los chilenos, es el arroz. Existe un sinfín de formas de cómo prepararlo, además de distintos tipos de arroz.
Entre ellos, y el que tiene más nutrientes gracias a la forma en que se prepara, es el arroz integral.
En un articulo publicado en el portal científico LiveScience.com, explican que “el arroz integral es un grano integral, lo que significa que contiene tres partes del grano: la capa externa, llena de fibra, llamada salvado, el núcleo rico en nutrientes, el germen, y la capa intermedia con almidón, llamada endospermo”, según Harvard TH Chan, Escuela de Salud Pública.
Imagen: Gentileza Pixabay
En diferencia, el arroz blanco es un grano refinado. Esto significa que el salvado y el germen se han eliminado, dejando solo la endospora, dice la Escuela de Salud Pública. “Este proceso elimina la fibra y los nutrientes. Algunos de estos nutrientes, incluidas las vitaminas B y el hierro, se vuelven a agregar al arroz blanco ‘enriquecido’, pero la fibra no se agrega de nuevo”, indica en el informe la Asociación Americana del Corazón.
Nutrientes del arroz integral
El arroz integral es una comida con muchos beneficios nutritivos, y además es bajo en calorías (216 calorías por taza). Estos son los nutrientes que podrías encontrar en este arroz:
–Vitaminas B, que interviene en muchas funciones biológicas.
-El folato (ácido fólico), una vitamina B que ayuda al cuerpo a formar nuevas células y puede prevenir ciertos defectos de nacimiento.
-El hierro, un mineral que el cuerpo usa para transportar oxígeno en la sangre.
-El magnesio, un mineral que está involucrado en más de 300 funciones biológicas-
-El selenio, un mineral involucrado en el sistema inmunológico y la regulación de la glándula tiroides.
Además, el arroz integral no tiene gluten, es alto en fibra, no contiene grasas trans ni colesterol, y solo tiene trazas de grasa y sodio.
Imagen: Gentileza Pixabay
¿Se cocina de la misma forma que el arroz blanco?
El sitio web, Mejorconsalud.com, indica que ambos tipos de arroz se preparan de forma distinta. El arroz integral debe cocinarse con más agua y por más tiempo que el arroz blanco. “Recomendamos lavarlo primeramente e incluso ponerlo en remojo unas horas antes, como si fuera una legumbre”, dice el portal.
Para cocinarlo correctamente, el portal aconseja que: “la proporción es de una taza de arroz integral por 3 tazas de agua, y el tiempo de cocción suele ser de entre 30 y 60 minutos” según el recipiente, el tipo de arroz integral que tienes.
Además, explica que se debe poner a hervir el arroz en agua fría, y se le agregará sal casi al final de su cocción, ya que la sal ayudará a que el arroz se abra completamente.
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