La noticia de ser padre produce una mezcla de emociones en muchos hombres; alegría, temor y ansiedad inundan su cabeza, sobre todo en una sociedad como la actual donde él tendrá un rol protagónico y participativo en la crianza del nuevo integrante de la familia.
Por un lado, aparecen los sentimientos de alegría, orgullo y felicidad plena, pero en paralelo puede surgir el temor, el rechazo y el agobio.
Las expectativas que con mayor frecuencia se presentan ante la llegada del primer hijo son emociones y pensamientos positivos que tienen relación con proyecciones personales, la consolidación de la pareja y la construcción de la familia.
Por otro lado, las principales aprehensiones que enfrentan los futuros papás son el temor a no ser capaz de brindarle el apoyo necesario a sus parejas, al cambio de vida, ya que nada volverá a ser lo mismo con el nacimiento del hijo, y a la nueva relación de pareja que vivirán, pues puede sentirse excluido porque su mujer se transformará en madre.
Al igual que la madre, el padre también presenta un proceso de adaptación frente a esta nueva etapa que comienza a vivir. “Todo cambio en la vida conlleva inestabilidades emocionales que son esperadas, más aún en el proceso de ser padres, pero lo más importante es comunicar estos sentimientos a la pareja”,explica Bernardita Albornoz, sicóloga de Clínica Avansalud.
El nacimiento
En la mayoría de las familias, el papá es el complemento de la mamá, es el que provee resguardo económico al hogar, mientras la madre se dedica a entregar los primeros cuidados al bebé. “Pero en un porcentaje, cada vez mayor, el padre también cumple funciones de cuidado del bebé, proporcionando afecto y apego al nuevo integrante de la familia”, indica la profesional.
Finalmente la experta, aconseja a los padres primerizos y a sus parejas que mantengan una buena comunicación, que conversen constantemente sobre sus necesidades afectivas y sobre las expectativas que tienen uno del otro como padre, ya que así se irá consolidando la relación familiar y podrán asumir sus roles en armonía para sustentar el desarrollo del niño.
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