Ya lo vimos alguna vez en “Sex and the City”: Charlotte, uno de los personajes, terminaba con su novio porque éste no sabía besar. Cada vez que lo intentaba, la mordía, salivaba más de la cuenta e incluso la dejó moreteada antes de que ella decidiera terminar con él.
Es que un mal beso puede ser motivo de ruptura, como indica un estudio del sitio Match.com replicado en la web de Terra.com, dónde aseguran que, al menos uno de cada cuatro encuestados, terminó alguna vez por un pésimo ósculo.
Por eso, los sitios Cosmopolitantv.es y Nosotras.com hicieron un conteo de besos que deberías estarle dando sí o sí a tu pareja, no sólo de buena forma, sino que además porque son caricias que los ayudarán a que la temperatura suba.
Cinco besos para perder la cabeza
Besos que son caricias
En este tipo de ósculos, los labios sólo se rozan sensualmente. La idea es encender a tu pareja con algo simple y tierno, pero que a la vez puede ser de lo más excitante. En Nosotras.com recomiendan hacerlo en las comisuras de los labios, para ir tentando de a poco a tu galán.
Besos inesperados
Según Cosmopolitantv.es este tipo de besos es uno de los que más los prende, ya que casi lo agarran por sorpresa. Inténtalo y dale un giro aún más inesperado al, por ejemplo, comer algo bien dulce antes de acariciarlo, como unas fresas, lo que activará su sentido del gusto y hará que te pida más.
Besos “estrellas”
Este tipo de besuqueo corresponde a aquel donde el intercambio de saliva y lengua es de lo más explícito. Según la web de Cosmo, este ósculo les gusta a los hombres porque “de forma inconsciente pasarían su testosterona a la mujer para aumentar su excitación”.
Para ponerlo en práctica, puedes comenzar succionando sus labios, sin dejarlo que todavía introduzca su lengua. Luego, besa su labio superior y, después de un rato, deja que finalmente su lengua toque tus dientes y el interior de tus mejillas, acabando con un gran beso apasionado.
Besos salvajes
Agrégale a tu caricia una pequeña dosis de dolor y verás cómo se le eriza la piel. Haz que tu beso se transforme de tierno en salvaje con una simple movida: un mordisco, que puede ir acompañado de tus uñas clavadas en su espalda o un leve tirón de pelo. Puede sonar extraño, pero no por eso le dejará de gustar.
En Nosotras.com además agregan otro consejo: atreverse a besar las orejas, una zona repleta de terminaciones nerviosas donde un mordisquito no vendría nada de mal.
Besos que “activan”
Este es un beso que también despertará todo su sentido del gusto y también del olfato. Usa un labial de mentol o come antes algún dulce de menta extra fuerte. Esto hará que se vuelva loco con la combinación del calor de tus besos con la frescura, y frío, del mentol, que le harán sentir un rico e inolvidable cosquilleo.
COMENTAR