Una vibradora que ejercita todos los músculos y una para pedalear con las manos, entre las más novedosas.
Johnny G fue el ideólogo del contagioso spinning, disciplina aeróbica que combina ejercicios en una bicicleta estática con música. Una lesión a las piernas, sin embargo, lo privó de seguir practicando su invención. Fue así como diseñó una nueva máquina, el kranking, una especie de bicicleta para los brazos que permite ejercitar el tren superior del cuerpo, pedaleando, pero con las manos. La gracia es que el aparato mantiene el ejercicio cardiovascular de su antecesora. Como el spinning, el kranking ya es sensación y es una de las máquinas de última generación que están invadiendo los gimnasios del país este verano.
Posee un asiento removible, que permite a personas con alguna discapacidad en sus piernas hacer ejercicios para mantener su capacidad aeróbica. El gimnasio Novasports, que posee estos aparatos, los usa en clases grupales, en las que como el spinning, se práctica al ritmo frenético de hits radiales.
Pero si de novedad se trata, la plataforma vibratoria es lo último que ha llegado al país. El aparato promete trabajar toda la musculatura del cuerpo sólo subiéndose a él. El dispositivo tonifica los músculos a partir de la vibración que genera al aumentar la contracción muscular, la que cambia según la postura del usuario.
“Cuando te subes al día siguiente te va a doler todo”, asegura Carlos Valdés, administrador del gimnasio Meds de Isabel La Católica, uno de los recintos que posee la plataforma. Valdés dice que las vibraciones ejercitan intensamente todos los músculos.
Eduardo Caprile, de Novasports, afirma que el aparato ha sido un éxito. Es el mismo que usa Shakira y Rafael Nadal. ¿Usuarios? Preferentemente mujeres, “porque reemplaza las pesas, aunque no por eso es menos efectivo”.
Menos pesas
Versa Pulley, también en Meds, es otra de las novedades estivales. Se trata de una máquina adosada a la pared, con una cuerda elástica que reemplaza el levantamiento de pesas. El aparato permite realizar distintos ejercicios, como por ejemplo, imitar la volea del tenis.
En Sportlife del Cerro El Plomo, el estreno es la Summit, una escaladora, que a diferencia de las tradicionales, tiene una gama más amplia de movimientos que mejora la capacidad cardiovascular, fortalece los glúteos mientras el usuario ve televisión. Federico Noya, gerente del recinto, no duda en recomendarla. “Es una de las mejores máquinas cardiovasculares que hay. Tengo mucha gente que escala que la usa mucho”, dice.
Otra innovación es la TRX, aparato de cuerdas que trabaja la musculatura a través de la suspensión, ya que cuelgan del techo. La máquina reemplaza la carga de las pesas, ya que usa el propio cuerpo de la persona. “Es muy llamativa. Le está enseñando a las personas a salir del paradigma de las máquinas”, dice Valdés, de Meds, ya que el aparato integra aspectos que no aportan las pesas o las mancuernas.
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