Las cervezas, el vino blanco y el champán son los invitados de piedra en cualquier celebración. Y todos sabemos que la regla de oro para disfrutarlos como corresponde, es que estén bien helados.
Sin embargo, es muy común olvidar ponerlos a enfriar antes de que lleguen los invitados. Es por esto que en el sitio online de el diario El País, compartieron algunos prácticos trucos para tener estas botellas a la temperatura adecuada y cómo lograr enfriarlas en pocos minutos.
Múltiples datos para un brindis perfecto
Como primer punto, en el sitio web señalan que los expertos en hostelería dicen que un truco básico para que el trago que tomes esté en su mejor punto es “sacar el vino blanco de la nevera 20 minutos antes de servirlo, y el vino tinto meterlo en la nevera 20 minutos antes de abrirlo”.
En cuanto a las temperaturas, el champán debe servirse a siete grados, “un vino blanco fermentado en barrica requiere 12 grados y un vino tinto reserva y gran reserva despliegan sus cualidades a 17 grados, según la guía de temperaturas del vino de la OCU”, señalan.
Es importante que cada tipo de alcohol esté en su temperatura, ya que “existe una fuerte influencia entre la temperatura a la que se encuentra el vino en el momento de su consumo y la experiencia sensorial, en todos sus aspectos. A nivel olfativo, porque hay menos evaporación de volátiles odoríferos, y gustativamente porque una temperatura demasiado fría realza la sensación de acidez al tratarse de ser una quimirecepción, como el gusto salado. En cambio, una temperatura demasiado caldeada provoca el efecto contrario frente al amargor, además de incrementar el efecto cálido del alcohol”, señala Antonio Palacios, doctor en Biología, experto en viticultura y Técnico Especialista en fermentaciones lácticas y Tecnología Enológica en los Laboratorios Excell-Ibérica.
Cómo enfriar una botella de manera rápida
Existen tres trucos para enfriar una botella en menos de 20 minutos.
El primero consiste en dejar arriba o abajo en el refrigerador para que un tinto o un blanco estén en su punto óptimo de temperatura para servir.
La segunda opción consiste en “coger una cubeta o una olla de cocina, llenarla de agua fría, cubitos de hielo y tres o cuatro cucharadas de sal. Si metemos aquí las botellas de vino pueden enfriar en 15 minutos”. Según los expertos, el truco está en las cucharadas de sal ya que son las encargadas de bajar la temperatura.
Finalmente, como última opción se pueden usar esas bolsas de gel para enfriar. “Como reacción endotérmica que enfría se usa una disolución del nitrato amónico (NH4NO3) en estos kits que ya están preparados”, señala el enólogo. “Si la proporción de nitrato amónico es de 30 gramos por cada 100 ml de agua, por ejemplo, se logra que la temperatura del líquido pase de 20ºC a 0ºC. Tanto estos dispositivos para enfriar como los que calientan, pueden actuar durante 15-20 minutos aproximadamente.”
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