Algunas los prefieren con escote, otras ajustados, con breteles o con capas… hay muchas variedades para elegir, pero no todos están hechas para nosotras. Para que quedes contenta y conforme, te damos algunos tips para encontrar un vestido ideal para tí.
Usar vestidos nos gusta, sobre todo en esta época del año en que el calor nos da la posibilidad de andar más ligeritas de ropa. Sin embargo, no todas tenemos el mismo físico y hay modelos que a algunas les vienen más que a otras.
No hay que temerle a este tipo de prenda, sino aprender a escogerlas. Cada diseño tiene su gracia y muchas veces pueden ayudarnosa disimular algunas cosas que no nos gustan; el secreto está en elegir el adecuado.
Para que no te desiluciones y aprendas a querer a los vestidos, te enseñamos a identificar cuál te conviene usar, dependiendo de tus atributos.
Si eres delgada…
El vestido con corte “cilindro” y strapless es especial para tí. Como no es ajustado, ayudará emparejar tu silueta y a disimular tu falta de curvas. Un truco que también puede ayudarte es el elegir uno que tenga un color en la parte superior y otro en la inferior.
Si tienes curvas…
Los vestidos con forma de “reloj de arena” te quedarán muy bien, pues resaltarán tu cintura que es más estrecha. Sin embargo, no lucirás el resto de tus atributos. Si quieres hacerlo, mejor elige un vestido de este tipo, pero con escote.
Si tienes hombros delgados y caderas anchas…
El modelo campana o también conocido como “imperio” es el tuyo. Elige este tipo de vestido si tienes una cintura bien definida, pues el corte se ceñirá en esta zona y la zona alta de tu cuerpo también se verá muy atractiva. Eso sí, el vestido debe ser muy liviano y suelto a la altura de la cadera.
Si tienes hombros anchos y caderas pequeñas…
Si eres voluptuosa de arriba, pero tus caderas son estrechas y tus piernas delgadas, usa vestidos cortos y que no sean ceñidos a tu cuerpo.
Colores y materiales ad hoc
En verano es conveniente usar materiales y géneros más livianos y en cuanto a las tonalidades, si vas a salir de noche, ocupa colores más oscuros y los claros de día. Si tu vestido tiene estampados puedes usarlo en ambas jornadas. Un tip: Acompaña tu vestido con tacos – si lo usas en alguna ocasión especial- y zapatos más bajos si es para la rutina.
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