En el marco del mes de mayo, donde se celebra la práctica del autoerotismo o masturbación a nivel mundial, un estudio realizado por Centro Miintimidad con 1.797 pacientes tratadas, descubrió que el 57,7% de ellas nunca han practicado el autoerotismo o masturbación, en el 72,9% de los casos se recibió educación restrictiva y el 73% nunca miró sus genitales.
A pesar de ello, el 75,5% de ellas lograba tener orgasmo con estimulación clitoriana en pareja. Mientras que las mujeres que sí practicaron autoerotismo o masturbación, experimentaron orgasmo con estimulación clitoriana en pareja en un 92,6% de los casos.
Esto nos demuestra la importancia de conocer nuestro cuerpo, nuestras sensaciones, nuestras zonas erógenas, empoderarnos de nuestra sexualidad y hacernos expertas de nuestro propio placer y sentirnos cómodas para vivir la intimidad, en forma individual o en pareja.
Muchas mujeres dejan de lado su satisfacción personal, por darle placer a su pareja. La educación sexual, sigue restringida a la prevención de embarazo y de enfermedades de transmisión sexual y queda aún mucho por aprender sobre el placer en las relaciones íntimas.
El concepto de culpa, pecado y la educación restrictiva no colaboran en lograr una salud sexual satisfactoria. Es por esto que tantas mujeres tienen encuentros íntimos por cumplir con la tarea, para que su pareja no se enoje, para que no las moleste por unos días, para que no las deje.
Pero la verdad es que conocer nuestro cuerpo y hacernos cargo de nuestra sexualidad y placer, es una responsabilidad y casi una obligación para lograr una vida en armonía en todos los aspectos.
Las animo a cerrar su dormitorio con llave, agarrar un espejo, mirar sus genitales, conocerse y explorar sus zonas de placer, saber dónde, cómo y con qué movimiento, presión y velocidad les gusta ser estimuladas para lograr placer sexual.
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