Siempre estamos buscando lucir más esbeltas, ya sea de la mano de dietas, ejercicios o algunos truquitos con la ropa. Así, usar fajas o ropa ajustada que amolde nuestro cuerpo se ha convertido en una práctica habitual y masiva, validada por estrellas de la talla de Kim Kardashian, quien hace gala de su cintura de avispa obtenida gracias a productos como éstos.
Sin embargo, el uso de estos elementos puede terminar ocasionando problemas para nuestra salud, que son mucho más graves que el hecho de que se nos vean algunos rollitos.
Álvaro Quiroz, docente de la Escuela de Pedagogía en Educación Física de la Universidad del Pacífico, explica que los riesgos incluyen desde interrumpir nuestra respiración normal hasta causar desmayos. Acá te contamos por qué deberías dejar estas prendas sólo para ocasiones puntuales y descartarlas para el día a día.
Los riesgos para tu salud
Presión excesiva del tórax
Según el experto, uno de los mayores problemas que causa el uso de prendas apretadas, o que derechamente fajan nuestro abdomen, es presionar demasiado nuestro tórax.
“El uso prolongado de ropa ajustada podría interrumpir los procesos respiratorios normales al impedir un normal desplazamiento de la caja torácica y, en un caso muy extremo, la falta de una correcta ventilación podría provocar déficit de oxígeno, pasando por mareos y llegar a desmayos”, explica.
Cuidado con el corazón
Según la Sociedad Española de Cardiología, otro de los graves riesgos del uso continuo de ropa demasiado ceñida es que podría provocar problemas cardíacos, ya que dificulta la circulación sanguínea.
Un hecho que es corroborado por la Fundación Española del Corazón (FEC), en declaraciones recogidas por el sitio Vanguardia.com, donde señalan que la utilización de estas prendas “puede favorecer la aparición de problemas al corazón, ya que provoca dificultad en el retorno de la sangre venosa y aumento de los edemas. Así, se puede propiciar la aparición de trombos venosos, principalmente en las piernas, que pueden ser graves”.
Problemas digestivos y lumbares
Otra de las consecuencias negativas de la ropa ajustada es “la baja movilidad gastrointestinal, lo que altera las funciones digestivas”, explica Álvaro Quiroz, docente de la Universidad del Pacífico, agregando que, además, genera que “los líquidos gástricos asciendan, produciendo reflujo o inclusive úlceras estomacales”.
Quiroz, quien además posee un magister en Fisiología del Ejercicio, señala también que, junto con las fajas, otras prendas excesivamente ajustadas con las que hay que tener cuidado son los jeans, ya que “pueden provocar alteraciones en la postura y producir molestias en la zona lumbar”.
Ojo con la ropa interior
Finalmente, el académico advierte sobre la lencería ultra ajustada. “La ropa interior que dice ‘afinar la figura’, podría interferir en el retorno venoso, generando retención de líquido en algunas zonas e inclusive producir celulitis en quienes no la presentan”, advierte.
Sin embargo, lo más grave es que también podría aumentar “la temperatura y baja ventilación en la zona genital, lo que podría provocar más infecciones producto de hongos y bacterias, especialmente en las mujeres. En tanto, en los hombres, el uso de boxers muy ceñidos podría provocarles una baja en la producción espermática”, finaliza el experto.
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