No podemos negar que todas nos hemos levantado más de alguna vez con el pie izquierdo y odiamos todo lo que se nos cruce, incluso nuestro trabajo. Pero cuando el malestar con esto último se vuelve reiterativo, estamos en problemas ¿Pero cómo saber si solo se trata de un mal momento o si definitivamente hay que hacer un cambio en nuestra vida?
Óscar Cáceres , Coach Senior y creador del modelo Extraordinary People Model (EPM), conversó con nosotras sobre los efectos que produce en las personas un constante malestar con el trabajo. Y acá te contamos cuáles son.
EFECTOS NOCIVOS DEL ODIO AL TRABAJO
1. Depresión de domingo en la tarde
Según nos explicó el coach, quienes no están contentos con su trabajo, les invade una sensación de tristeza y melancolía cada domingo. A este estado, que se agudiza a medida que llega la noche, Cáceres le llama “depresión de domingo en la tarde”.
2. Odio del lunes, viernes de alegría
Quienes deben comenzar a pensar en un cambio según Cáceres, son aquellos que de verdad creen que el Lunes es lo peor. Tanto así que se sienten con poca energía aunque hayan descansado durante el fin de semana. Sin embargo cuando llega el viernes, se llenan de energía a pesar de estar exhaustos tras los días de trabajo anteriores. Incluso son capaces de organizar y asistir a actividades sociales sin reclamar.
3. Saturación y desencanto con el entorno laboral
Otro efecto que tiene en las personas el odio al trabajo es la sensación de no estar cómodo en tu entorno laboral. Esto hace que quienes viven esta situación estén constatemente de mal humor y tengan malas relaciones con sus jefaturas y/o compañeros de trabajo.
4. Bajo rendimiento laboral
Otra consecuencia que conlleva el no estar conforme con el lugar de trabajo, es sentir la necesidad de evadir las labores diarias. Por lo general, quienes están al borde del colapso suelen buscar un escape navegando por Internet, chateando o interactuando en redes sociales, mientras cuentan los minutos para que termine el día.
5. Irritación y estrés
Es muy común que quienes no están contentos con su trabajo presenten malestares físicos como fuertes dolores de cabeza o cansancio fuera de lo común, además de una sensación de negativismo e irritación constante.
6. Aislamiento
Existen muchas personas profesionales que no requieren trabajar en equipo y rinden de buena manera trabajando solos. Sin embargo cuando esta situación no ha sido así desde el comienzo y repentinamente quienes han trabajado siempre en contacto con otros compañeros no tienen ganas de trabajar en equipo o sienten que las reuniones son interminables y que nada aportan al trabajo, desagradables y sin sentido, es otra señal de que se debe dar un giro en 180 grados.
7. Descargo con otros
Y bueno, quienes definitivamente deben comenzar a subrayar la sección de empleos del diario, son las personas que terminan por volcar toda su ira en sus compañeros, jefes y/o clientes, haciéndolos sentir incómodos con malos tratos o una actitud desganada.
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