“Yo amo mi libertad”. Con esa frase la comediante colombiana, Alejandra Azcárate, explicó en el programa “Vértigo” de Canal 13, la decisión que tomó junto a su marido de no traer un hijo al mundo.
La comediante que se hizo conocida en Chile por su rutina en la última versión del Festival de Viña, llegó a la instancia más íntima del programa, donde compartió su visión sobre la maternidad y contó por qué finalmente decidió no convertirse en madre.
“Es una decisión en pareja. Oigo a muchas mujeres que dicen ‘es que tuve hijos porque mi marido me lo pidió’. Un hijo no es un regalo, un hijo es una decisión de vida total y yo amo mi libertad”, dijo la comediante.
Agregando que “los hijos son de la mamá. Por muy buen padre que sea el hombre, el hijo nace de las vísceras de la mamá. Y si uno aspira a ser una buena mamá, la entrega es total. Es un acto absoluto de amor incondicional”.
Frente a la pregunta de si alguna vez ha sentido el instinto maternal, la colombiana fue tajante al responder. “Yo ese llamado de la selva tan exótico no lo he tenido. Yo tengo amor e instinto maternal frente a los niños que veo, frente a la naturaleza, frente a los animales. Amo a los animales, soy una defensora de ellos. Me conmueve la niñez, pero decidí en mi vida tomar con sensatez mi libertad. Respeto mucho las que han tomado la opción contraria y quieren tener sus hijos y se realizan siendo madres, yo no”, aseguró. Agregando que, “admiro profundamente a las mamás por su valentía y porque el trabajo de una mamá no se acaba nunca”.
Sin embargo, esta decisión no ha sido fácil para Alejandra. “Me he sentido tremendamente cuestionada. Porque la gente no solo se toma el atrevimiento de inmiscuirse en la vida ajena y tomar decisiones por uno, si no porque no respetan. Yo no ando preguntándole a las mujeres por qué tienen uno, dos o tres (hijos), simplemente lo respeto. No entiendo por qué les parece tan extraño que yo quiera tener cero. Es mi opción de vida, soy feliz así. Le llevo alegría a la gente y amo mi carrera”, dijo la colombiana que terminó enviando un potente mensaje a todas las mujeres que sienten los mismo que ella con respecto a la maternidad.
“Les diría que uno no puede poner una decisión tan radical en su vida en manos de los otros. Las mujeres históricamente hemos cargado con una cantidad de responsabilidades, de culpas, de prejuicios, de juicios, no solo a nivel religioso, sociológico, psicológico, sino también familiar, a mi me parece que la sociedad latina envejece a la mujer muy rápido. Nos obligan a tener relaciones que no valen la pena. (…) Les diría a las mujeres sean consecuentes y coherente con lo que desean en su vida, no complazcan a los demás, sean felices y hagan lo que quieran”, finalizó.
COMENTAR