El pasado 30 de marzo falleció en Japón un bebé de seis meses, luego de que sus padres le dieran miel mezclada con jugo.
Según informa The Japan Time, el pequeño estuvo internado varias semanas con convulsiones e insuficiencia respiratoria, debido a que la miel le provocó botulismo, una intoxicación ocasionada por las toxinas que produce la bacteria Clostridium botulinum.
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Y aunque, es la primera muerte causada por botulismo infantil desde 1986 en Japón, el lamentable hecho encendió las alertas sobre dar a los bebés productos naturales que se consideran saludables, pero sin saber, podrían ocasionar el efecto contrario, como es el caso de la miel.
Riesgos de darle miel a niños menores de un año
Según un informe del Comité Científico de la Agencia Española de Consumo, Seguridad Alimentaria y Nutrición (AECOSAN), uno de los peores productos que podemos darle a nuestros bebés, es nada menos que la miel e infusiones de especies vegetales, por el riesgo de padecer Botulismo.
Una situación preocupante, si consideramos la cantidad de veces que erróneamente se recomiendan prácticas como, añadir miel a los alimentos infantiles, untar miel en el pezón antes de cada toma, en los labios del bebé o en el chupete, para reducir la ansiedad o el llanto.
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¿Qué es el Botulismo?
El Botulismo es una intoxicación producida por una neurotoxina que ataca al sistema nervioso. Según el mismo informe de la AECOSAN, mencionado en el sitio Consumer.es, los síntomas del Botulismo van desde “náuseas, vómitos, fatiga, mareos, dolor de cabeza, debilidad en las piernas, visión doble y dificultad para respirar”.
“Un niño de un año es particularmente susceptible al botulismo, porque su sistema inmunológico no está del todo preparado para defenderse de los microbios“, explican.
Según el informe de la AECOSAN “de los posibles alimentos que se han tratado de vincular con el botulismo infantil (miel, jarabe de maíz, preparados deshidratados para lactantes, cereales, infusiones de especies vegetales, etc.), la miel es el que con mayor frecuencia aparece como responsable en los casos en los que se logra identificar esta infección”.
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El trabajo mencionado, explica además que la presencia de esporas de C. botulinum en la miel puede provenir del polen, del tracto digestivo de las abejas, polvo, aire, tierra, agua y néctar. Esto se traduciría en un reflejo de la contaminación existente en el medio ambiente y llevaría a una alta probabilidad de infección en los bebés menores a 12 meses.
¿Qué otros alimentos no se recomienda darle a los bebés?
Según afirma la nutricionista y dietista, Lucía Bultó, en el sitio Guía Infantil, existen otros alimentos que también se deben evitar en los bebés. A continuación te nombramos algunos:
-Sal: “Un bebé no necesita prácticamente sal en sus comidas, ya que su paladar no está acostumbrado a ella. Demasiada sal podría sobrecargar sus riñones”, afirma.
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-Azúcar: No es bueno darle a los bebés alimentos con mucha azúcar, ya que no es tan necesaria en su alimentación y no le beneficia. Además, la leche y los jugos ya tienen azúcar de manera natural y no hay que agregarle más.
-Huevos: Según la experta, antes del primer año de edad, el huevo puede provocar reacciones alérgicas.
-Mariscos: Puede producir reacciones alérgicas que se manifiestan con vómitos, diarrea o manchas en la piel.
-Frutas Rojas: Fresas, frambuesas y arándanos son frutas que, en algunos casos, pueden favorecer las reacciones alérgicas.
-Frutos secos: Las nueces, almendras, cacahuetes y otros frutos secos no se recomiendan antes de cumplir el primer año de edad por posibles reacciones alérgicas. Si en el bebé hay historial de familia con alergia a los frutos secos, entonces hay que esperar hasta los 2 años de edad.
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