En abril de 2018, por votación unánime en el Senado, Patricia Muñoz fue designada como la primera defensora de Los Derechos de la Niñez.
La importancia de visibilizar las demandas de los niños, niñas y adolescentes y cómo evitar la vulneración de sus derechos, es un tema que, sin duda, le ha quitado el sueño desde la creación de la Defensoría de la Niñez, como un organismo autónomo. Pero tras el estallido social, su trabajo ha tomado mayor protagonismo y relevancia.
Y es que la abogada opina que la crisis social que atraviesa nuestro país, es una oportunidad para visibilizar las demandas y derechos de niños, niñas y adolescentes, (NNA).
“El estallido social tiene mucho que explicar sobre la incapacidad del Estado de atender y generar espacios. Y no nos olvidemos que este tema se inició a raíz de una organización organizada por adolescentes. Los niños, niñas y adolescentes, son el futuro, sí, pero también son el presente”, afirmó.
Imagen: Twitter @defensorianinez
En cuanto a lo que considera más urgente de resolver en el marco de un nuevo pacto social, Patricia dice que los niños del Sename encabezarían la lista de prioridades junto con la Ley del Sistema de Garantías de la Niñez, porque favorece la protección de derechos de todos y todas las niñas, niños y adolescentes del país, que según explicó “se aprobó en general la semana pasada, pero no tiene todos los elementos para constituir un sistema”.
Por otra parte, la defensora de la niñez se refirió a la vulneración de derechos en contra de menores de edad en medio de las manifestaciones.
“El Instituto Nacional de Derechos Humanos y la Defensoría de la Niñez son los organismos autónomos para defender. Cuando como defensoría tomamos conocimiento, informamos al INDH y verificamos si existe causa penal en la fiscalía y si eso no pasa, denunciamos a la fiscalía”, explicó
Sobre la asistencia de niños pequeños a las manifestaciones y cómo explicarles lo que ocurre, Patricia aclaró que “el derecho a manifestarse es un derecho humano, pero hay que tener sentido de realidad. Desafortunadamente en manifestaciones implican violencia que no queremos que los niños presencien. Si yo como familiar sé que estoy en un lugar donde permanentemente ocurre violencia, la recomendación sería evitar llevarlos, para que no vean o no sean víctimas (…) Si las manifestaciones son como en Plaza Ñuñoa y son culturales y el ambiente es diferente, eso es distinto. Hay que confiar en el criterio de los padres y en que su primera preocupación debe ser en bienestar de los niños”.
Entrevista Biut
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