En noviembre de 2019, Alison Mandel reveló que sería madre por primera vez junto a su esposo, el comediante Pedro Ruminot. Ahora en una extensa entrevista con Nueva Mujer, contó como ha sido su proceso, el que también ha compartido por Instagram. Ahí intenta mostrar el lado ”B” del embarazo y confiesa que “creo que faltan muchos más espacios que hablen del otro lado del embarazo, que se relaciona con los miedos que una mujer enfrenta”.
Sobre cómo lo contó y el momento en que lo hizo, dijo que a los cinco meses de embarazo porque cuenta que ”ya mi guata era demasiado grande”. Alison, confiesa que a pesar de ser un lindo proceso cree que ”se habla sólo de un lado del embarazo, y tiene que ver con que la gente socialmente siempre te obliga a vivir cosas que no son tan reales”.
En esta misma línea dice que en el embarazo ”visito el lado oscuro a veces. No sé si tiene que ver con cómo se gestó mi embarazo o no, pero a veces me cuestiono muchas cosas. Sobre todo en una época donde no lo sientes mucho y te preguntas si está bien o mal”.
Imagen: Instagram @alisonmandel
Así mismo, cuenta que se ha sentido vulnerable durante la gestión y cuenta que ”tienes que cuidarte mucho más, no sabes si lo que estás haciendo está bien. Faltan esas instancias de conversación con la gente, porque te siguen diciendo: ‘Disfrútalo. Es la etapa más plena de una mujer’, y tú vomitando 20 veces al día”.
Sobre los comentarios que recibe en redes sociales sobre su embarazo, la actriz opina con humor que hay ”¡Demasiadas mamás perfectas!’‘.
Sin embargo, lo anterior lo considera un problema ya que cuenta que ”ha habido millones de cambios en lo feminista (…) sin embargo, sigue habiendo gente que es invasiva, que te anula y te limita sólo por ser mujer”. La comediante considera que ”todo el mundo es dueño de una verdad. ¡Me demoré cuatro años en quedar embarazada! Una estría es la huea que menos me puede importar en el mundo”.
Imagen: Instagram @pedroruminot
En cuanto al proceso que vivió para quedar embarazada, Alison Mandel recordó que ”fue largo el proceso en el que decidimos hacer un tratamiento. Cuando lo intentas un año y no te embarazas, es cuando recién te cuestionas si tienes un problema. Ahí quedé embarazada naturalmente, perdí esa guagua y después ya no quedé nunca más”. También contó que ”es bien desesperante, la gente te pone una presión y te dice ‘no estai’ relajada’. Siempre es tu culpa”.
Desde ese escenario, Alison dice que ”debe haber pasado un año y medio hasta empezar a buscar un lugar que me hiciera sentir bien y un doctor que entendiera, porque te tienes que auto inyectar. Jamás pensé que iba a ser capaz de hacer algo así, pero, con la ayuda de la matrona, lo logré”.
Imagen: Instagram @alisonmandel
Las inyecciones fueron un tema para la actriz ya que ”el primer día estalló la inyección que me tenía que poner. Me dijeron que tuviera mucho cuidado con cada remedio, y el primer día dije ‘Ahí van 70 mil pesos”’. Sobre el tratamiento dice que ”es súper caro y te puede no funcionar también. Nosotros elegimos la Clínica de la Mujer que está en Viña. Es bastante más barata, y nos tincó más el equipo”.
La actriz y comediante además confesó que uno de los momentos más difíciles de su embarazo fue la muerte de su gata ‘Muamia’ cuando tenia 4 o 5 meses, donde tuvo que buscar ayuda profesional para lidiar con el dolor. Actualmente y con el estallido social dice estar optimista ya que dice que ‘‘mi hijo va a nacer en un mundo que exige más, que no calla tanto. Mucho más libre, más decidido, con más conocimiento”.
Imagen: Instagram @alisonmandel
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