En esta disciplina la ropa e implementos deben entregar seguridad y comodidad.
En un mundo donde las terapias de cuerpo y mente como el yoga, la meditación y los ejercicios de respiración profunda, parecen estar adquiriendo una mayor aceptación, existe otra arista importante a la hora de practicar una disciplina de este tipo: los implementos para apoyar la práctica.
Es recomendable darse un tiempo y fijarse en detalles que a veces no son tan fáciles de ver. “Los mats deben cumplir tres exigencias: primero, deben estar libres de tóxicos como el látex y de materiales pesados como cloro y plomo. Para darse cuenta, es necesario oler el producto. Si el olor es muy ‘plástico’, tiene que descartarse. Lo segundo es que no debe perder la memoria del material, el llamado ‘rebote’. Y tercero, un buen agarre es fundamental. Nadie quiere perseguir el mat por toda el recinto”, señala la especialista Claudia Sasmay, socia de Props Chile e instructora de Yoga.
Además, es importante considerar el tipo de yoga que se realiza. No es lo mismo Bikram, donde la ropa cómoda para practicar es diferente a la de Ayengar, por ejemplo. Lo mismo pasa con los implementos necesarios. “La práctica de Bikram es muy física, implica un ambiente de mucho calor y transpiración, de ahí que una toalla muy absorbente y botellas de agua, sean vitales para practicar sin preocupaciones, mientras que Ayengar busca la correcta alineación corporal, por lo tanto soportes como un cubo o cinto son vitales”, señala la ejecutiva.
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