La dieta Paleo, es una de las nuevas tendencias dietéticas que promete convertirnos en personas más saludables y en mejor forma. ¿Cómo? Volviendo a lo básico en cuanto al consumo de alimentos, dejando de lado el azúcar o las harinas procesadas.
¿Qué podemos comer?
Principalmente, la dieta Paleo nos exige comer muchas verduras, como base de nuestro plato. En la pirámide le sigue la carne, el pescado y los huevos, y en tercer lugar están la fruta, los frutos secos, semillas, aceites, hierbas y aliños orgánicos.
En perspectiva, se puede relacionar esta dieta con la recolección y la caza, convirtiendo nuestra dieta en una mucho más básica.
Por supuesto que el consumo de alcohol queda restringido, al igual que el de los jugos artificiales o bebidas. Principalmente, se debe consumir agua y algo de té. Tampoco verás lácteos en un recetario de la dieta Paleo, pues siguen la creencia que indica que ningún animal debería consumir leche más allá de la infancia.
¿Cuándo comer?
A diferencia de otras dietas que exigen que comamos cada tres o cuatro horas, para mantener el metabolismo funcionando, la dieta Paleo señala que solo tenemos que comer cuando estemos hambrientos.
¿Qué beneficios tiene?
El principal beneficio de esta dieta es que es poco restrictiva, pues puedes comer cada vez que tengas hambre y en las cantidades que te sientas satisfecho.
Es importante recordar que el principal componente del plato siempre deben ser los vegetales, por lo que la carne, si bien está presente, no debe ser protagonista.
¿Por qué la critican?
Algunas de las principales críticas de la dieta Paleo indican que es muy costoso practicarla, y que quita de nuestra vida alimentos como los lácteos, harinas y granos en general.
Pero los precursores de este estilo de vida aseguran que no deberíamos preocuparnos por estos componentes, pues aseguran que no los necesitamos.
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