Revisa este extracto de la nota Cómo ser crespa en verano de Revista Mujer.
“El calor y la humedad del ambiente nunca han sido aliados del pelo ondulado, porque, entre otras cosas, lo esponjan y lo “aleonan”. Sin embargo, actualmente el mercado cuenta con muchas fórmulas especiales para este tipo de cabello que evitan sus clásicos problemas en época de vacaciones.
El pelo ondulado sufre especialmente cuando se expone al sol, al cloro del agua, a la arena y a la salinidad del ambiente de la costa. Se daña porque estos factores alteran los efectos positivos de la queratina y favorecen la deshidratación, una característica que acompaña todo el año al pelo crespo, casi como un estado propio de este tipo de cabello a partir de su sinuosa forma y mayor porosidad.
La falta de humedad genera un aspecto opaco y dificulta el desenredo, además de la apertura de puntas y el indeseado efecto frizz, el que, a su vez, deriva en exceso de volumen. ¿Cómo controlar el pelo entonces? Con la ayuda de expertos estilistas resumimos las claves”.
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