Siempre hemos sabido que las bebidas gaseosas hacen mal para la salud y sobre todo, que hacen engordar por la cantidad de azúcar que estas contienen. Sin embargo, las bebidas light siempre han sido una excelente alternativa para quienes son fanáticos de estos productos y no quieren ganar kilos de más.
Pero según un estudio de la Sociedad Americana de Geriatría, publicado en revista Time, asegura que quienes beben refrescos diet ganan casi el triple de la grasa abdominal, en un periodo de nueve años, que quienes no la consumen.
La investigación analizó los datos de 749 personas mayores de 65 años a las cuales se les pidió cada dos años indicar el número de latas de bebidas que bebían durante el día, cuáles de esos refrescos eran light y cuáles eran bebidas normales.
El resultado sorprendió a los investigadores, pues el estudio publicado por la revista estadounidense, reveló que las personas que no bebían bebidas light ganaron durante el periodo de estudio aproximadamente 0.8 pulgadas alrededor de sus cinturas. Y quienes las consumían regularmente ganaron alrededor de 1.8 pulgadas. Mientras que aquellos que sí consumieron comunmente bebidas diet ganaron 3.2 pulgadas.
Helen Hazuda, es profesora de medicina en la University of Texas Health Science Center en San Antonio y explicó a la revista Time a qué se debe este fenómeno.
“Nuestro cuerpo está acostumbrado a saber que un sabor dulce significa consumir energía en forma de calorías, sin embargo, los edulcorantes artificiales confunden nuestro cuerpo y debilitan la relación dulzura/calorías en nuestro cerebro. Esto nos puede llevar a tener más antojos de golosinas dulces y por ende, a ganar más peso”, dijo la experta.
LOS OTROS EFECTOS DE CONSUMIR ENDULCOLORANTES
Según indica la misma publicación de la revista Time, otro estudio que se realizó con ratones mostró que los endulcolorantes artificiales cambiaron las bacterias intestinales de éstos, haciéndolos vulnerables a la resistencia a la insulina e intolerantes a la glucosa.
Así mismo, otra investigación con ratones demostró que los edulcolorantes artificiales están asociados con una disminución de la leptina, una hormona encargada de inhibir el hambre.
COMENTAR