Cada vez son más las que se atreven a ingresar al quirófano para mejorar su figura. En el caso de quienes tienen la llamada “guatita de delantal” la mejor alternativa sería la Abdominoplastía. Se trata de una cirugía que elimina el exceso de piel y reposiciona los músculos de la pared abdominal, sin embargo conlleva algunos riesgos que es importanta saber.
El doctor Esteban Torres Egaña, cirujano plástico y reconstructivo, egresado UC y miembro de la Asociación Chilena de Cirugía Plástica, dice que “es una intervención que se recomienda luego de una pérdida de peso considerable o posterior a un embarazo; esto debido a que los tejidos suelen perder su tono. La cirugía deja una cicatriz que se esconde en la ropa interior y alrededor del ombligo. La mayoría de las veces se complementa con liposucción para poder mejorar el contorno corporal.” explica a Biut.
El especialista además recalca que “la operación debe realizarse por un especialista acreditado. Comprobar la especialidad de un médico es muy fácil, ya que accediendo a internet uno puede ver si un médico tiene realmente la especialidad de cirugía plástica, estos datos están en la superintendencia de salud, en la sección de Registro de Prestadores Individuales. También se puede revisar si es miembro de la Sociedad Chilena de Cirugía Plástica, en ambos casos ingresando el nombre del facultativo. En el caso de la clínica esta también debe estar acreditada para realizar una cirugía de esta envergadura”.
Torres además advierte que “el gran problema en nuestro país es que no hay ley de especialidad. Es así que por cada cirujano plástico formal, acreditado que existe en Chile, hay otros cinco médicos que no tienen la especialidad y se dedican a lo que llaman cirugía estética”.
Riesgos de las abdominoplastía
– Al igual que otros tipos de cirugías mayores, la reducción de abdomen implica riesgo de sangrado y diversas reacciones incluso a la anestesia.
– Infecciones y perdida de tejido por seguir las indicaciones.
– Mala cicatrización de las heridas, lo que podría derivar en un queloide
– Acumulación de líquido bajo la piel, lo que es conocido como seromas.
– En algunos casos, el tejido graso profundo dentro de la piel podría dañarse o morir, generando una necrosis. Uno de los principales factores para esto tiene que ver con el consumo de cigarro.
– La reubicación de los tejidos abdominales podría afectar a los nervios sensitivos del abdomen y en algunos casos, de los muslos. Lo anterior genera pérdida de sensibilidad.
– Los riesgos disminuyen en gran medida al someterse a este procedimiento con un cirujano que tenga la especialidad de plástico y las acreditaciones pertinentes. Lo mismo pasa el resto del equipo médico y la clínica donde se opere.
Lo que debes saber antes de someterte a una abdominoplastía
– Que él o la paciente esté en un peso ideal para obtener mejores resultados.
– Tiempo intervención: 3- 4 horas
– Anestesia General
– Hospitalización: 24- 48 horas
– Recuperación: 15 – 21 días
– Resultados duraderos siguiendo las recomendaciones nutricionales y de actividad física.
Ventajas de una abdominoplastía
– Se retira el exceso de piel y grasa del abdomen
– Se reduce la cintura, mejorando el contorno corporal
– Se terminan las irritaciones que se originar con el roce de la piel
– La cicatriz se realiza en la parte baja del abdomen y queda escondida debajo de la ropa interior
– Los resultados suelen verse de inmediato, a pesar de que se debe esperar algunos meses para tener el resultado final, siempre que se sigan las indicaciones del especialista.
¿En qué consta la intervención?
El especialista explica que “se hace una incisión abdominal, a la altura del pubis y otra alrededor del ombligo. El cirujano restablecerá la posición anatómica de los músculos rectos abdominales, mejorando la cintura y logrando un abdomen plano, eliminando la piel sobrante junto con la grasa acumulada en la zona”.
Cuidados luego de la intervención
Los primeros 15 días se debe estar en reposo relativo, sin realizar esfuerzos. No se puede conducir, fumar, beber alcohol o tomar el sol. Se deberá usar una faja abdominal durante un mes y medio. A partir del retiro de los drenajes el paciente podrá bañarse con normalidad. Debe dejar de realizar actividad física por un mes y se recomiendan sesiones de masajes linfáticos para ayudar a la recuperación.
Contraindicaciones
La abdominoplastía no debe realizarse en pacientes con problemas de coagulación, menores de edad, mujeres embarazadas o en periodo de lactancia, ni para quienes sufren enfermedades crónicas descompensadas como, diabetes, enfermedades autoinmunes, hipertensión, enfermedades cardiovasculares, obesidad y en fumadoras o personas con problemas de alcoholismo.
COMENTAR