Tiene 17 años y en 2011 dio el primer salto a la fama mundial tras obtener el tercer lugar en el Concurso Elite Model Look. Lieve Dannau ha desfilado en grandes pasarelas de Nueva York y Londres y hoy, de vuelta en Chile, integra el jurado de la nueva elección nacional. ¿Cómo ha evolucionado en este año y qué requisitos son necesarios para buscar el nuevo concepto de modelos? Todo en esta entrevista concedida en exclusiva a Biut.
Su entrada al mundo de la moda fue por casualidad, pero desde ese día, nada en su carrera de modelo lo ha sido. Desde que una amiga decidió enviar sus fotos a la Agencia Elite Model y la llamaron, Lieve paso de ser una desconocida, a ser una promesa del modelaje y una de las pocas chilenas que hoy tiene la proyección como para aspirar a una carrera como top model en el extranjero.
Sobre sus inicios, Dannau es clara al recordar que tenía bastantes prejuicios respecto al mundo del modelaje “pensaba que era un mundo muy manipulado y no tenía idea de qué era ser modelo. Antes de serlo veía a las mujeres muy flacas y al entrar en este mundo uno ve las personalidades. Cuando ve a alguien posando en una foto, la modelo nunca es la misma persona que en su vida real. Yo misma soy tímida, bastante introvertida, no me la creo mucho y por eso es muy diferente ver este mundo desde el exterior y estar adentro”, afirma la actual modelo quien como premio de Elite Model Look, firmó contrato con Elite Paris, asegurando trabajos por 100 mil dólares en las mejores pasarelas del mundo.
Y es cierto, hoy la belleza más que físico es actitid, motivación y naturalidad. “Lo que note es que ellos buscan es a niñas que sigan siendo ellas mismas, que no estén siempre tratando de mostrar algo falso. Acá en el casting hay muy poco tiempo para ver sus personalidades, pero cuando viajas al concurso internacional los jueces se dan el tiempo para conocerte y compartir”, recuerda Dannau.
Siete meses después de su elección, Lieve pretende terminar su cuarto medio y durante estos meses, se ha sentido con la libertad de rechazar y aceptar los trabajos que le han gustado, de manera de compatibilizar la carrera de modelaje con los estudios, su prioridad en estos momentos. Y si bien se reconoce como una niña responsable y que ha sabido complementar bien todos sus intereses, está consciente que su trabajo como modelo tendrá una vigencia máxima de 7 años.
COMENTAR