A veces son por gusto y a veces por trabajo, sea como sea, los cambios de imagen de los famosos siempre causarán revuelo entre sus seguidores.
Por gusto o por trabajo, los cambios de look siempre son un riesgo, sin embargo para los famosos lo son más debido al revuelo por la exposisión a la que se enfrentan a diario. Para los actores esto es muy habitual, ya que los distintos papeles que tienen que interpretar en el cine o en el teatro los obliga a vivir transformaciones excesivas, en muy poco tiempo, y que a veces no son favorables para ellos.
Uno de los casos más recientes que muestra el sitio Entremujeres.com es el de la mediática Kim Kardashian, quien hace pocos días subió a su cuenta de Twitter una foto donde su largo pelo negro ya no estaba. Sin embargo, sólo se trataba de un truco: Las imágenes estaban relacionadas a su participación en la tapa de la revista Vogue de Italia, donde ocupó una peluca que la hacía lucir un aspecto muy masculino, que si hubiese sido cierto la habría perjudicado mucho.
Hace unos años, la bella Charlize Theron tuvo que “opacar” su apariencia para la película Monster, con la que ganó un Oscar. Junto a esto tuvo usar implantes dentales que imitaban la dañada dentadura, y su maquillaje fue especialmente diseñado para asemejarse a la cruel Aileen.
Otra víctima de los cambios de look es la actriz Renée Zellweger, quien aumentó 14 kilos en sólo 7 meses para poder interpretar su personaje en El diario de Bridget Jones, film que la lanzó a la fama.
Un caso singular es el que tuvo la ganadora del Oscar y protagonista del Cisne Negro, Natalie Portman, quien tuvo que raparse para encarnar al personaje que hizo en V de Vendetta. Al principio este cambio impactó a la actriz -al verse sin su habitual melena- sin embargo, según declaró ella misma, al poco tiempo se sintió relajada de no tener que peinarse cada mañana. Portman es una de las pocas famosas que en vez de perder su atractivo se vio favorecida con ese nuevo look.
*Fotos: Vía Entremujeres.com
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