Si bien estamos acostumbradas a que los jeans de mujeres sean más ajustados y que los bolsillos sean más pequeños, se agradecería alguna vez poder ir con las manos vacías y guardar el smartphone en uno de los bolsillos del jeans.
Durante siglos estos espacios en nuestros pantalones han sido más pequeños que los de los hombres, y ahora los periodistas Jan Diehm y Amber Thomas realizaron un estudio para The Pudding donde analizaron 20 marcas de jeans y 80 modelos comercializados en Estados Unidos, informa el sitio Marie Claire. En la investigación encontraron que los jeans de mujer son casi un 50% más cortos y un 6,5% más estrechos que los de los hombres.
Las razones de esto vienen de la época medieval, donde los bolsillos estaban amarrados a la cintura y se escondían debajo de la ropa a modo de riñonera, señalan en el mismo estudio. Más adelante, para el siglo XVII, se comenzó a coser los bolsillos directamente en las prendas, pero para las mujeres siguió la costumbre de guardar las pertenencias en la riñonera.
Más adelante, los bolsillos empezaron a ser menos vistos y los hombres empezaron a guardar las pertenencias de las mujeres en los suyos. Como cada vez se fue reduciendo el espacio de los bolsillos de mujeres, también se vio reducida su independencia y autonomía.
A medida que pasó el tiempo, esto se fue haciendo una costumbre y pasó a ser un tema ligado a la igualdad de género, el cual tener bolsillos grandes para guardar cosas ha pasado a ser casi exclusivo en las prendas masculinas.
A raíz de esta “injusticia” en la moda, nació el hashtag #WeWantPockets, el cual las mujeres se han encargado de opinar en las redes sociales y criticar a las marcas por no hacer prendas con bolsillos útiles.
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