Estarán de acuerdo con que no existe nada más frustrante que seguir cientos de dietas y pasar mucho tiempo en el gimnasio, para finalmente mirarnos en el espejo y ver que, aunque efectivamente nos vemos más delgadas, nuestro abdomen, brazos y muslos se ven completamente caídos, por efecto de la flacidez.
Y es que lamentablemente es muy probable que hayamos hecho todo mal. Porque según explica Maribel Lopera, nutricionista y colaboradora de la clínica online española Smartsalus.com, en un artículo publicado por la versión Web de revista Hola España, los problemas de flacidez responden a varios factores, como por ejemplo las clásicas dietas que prometen bajar de peso en poco tiempo, una mala hidratación y alimentación, los embarazos y el paso del tiempo, entre otras cosas.
“Hay que tener cuidado con las dietas que someten a nuestro organismo a un estrés dietético de eliminación acelerada de peso para evitar el envejecimiento innecesario de la piel y músculos que, en la mayoría de casos, pierden nutrientes y elasticidad dando lugar a la flacidez o envejecimiento cutáneo”, explica Lopera a la sección En Forma de revista Hola.com.
Cómo debe ser una dieta antiflacidez
Según la especialista, la alimentación es la mejor arma contra la caída de los pechos, zonas del rostro, brazos y gluteos y otras partes del cuerpo. Es por esto que el tipo de dieta que debemos seguir debe ser “equilibrada en su contenido de hidratos de carbono, proteínas y grasas. Hidratante, para evitar la retención de líquidos y celulitis. Saciante, para ser compatible con el fuerte ejercicio físico diario necesario en un tratamiento para la flacidez. Rica en proteínas, vitaminas y oligoelementos. Y sin alcohol, café, conservantes ni aditivos que deshidratan y envejecen la piel”, explica en HolaEnForma.com.
Pero ¿qué comer? Revisa a continuación una lista de productos que la nutricionista recomienda en el sitio español:
– Hierbas aromáticas, concidas por su efecto detox y propiedades minerales. Según el sitio online Ecoagricultor.com, algunas de éstas son la cola de caballo, el boldo, la lavanda, la ortiga y el romero, entre otras.
– Especies que estimulan la microcirculación, como por ejemplo Cúrcuma, jengibre y el ginseng.
– Grasas vegetales hidratantes como el plátano, los higos, el aguacate o el coco.
– Frutas y verduras antioxidantes, con propiedades protectoras de la piel como los betacarotenos, como los pimientos, zanahorias, zapallo, tomate, brócoli, espinacas, acelgas etc.
– Hortalizas verdes, ricas en fibras, vitaminas y minerales.
– Frutas cítricas como las naranjas, kiwi, frutillas, mango, granada, lima, pomelo.
– El aceite de oliva aporta ácido oleico, que ayuda a mentaner las células de la piel en buenas condiciones.
– Las legumbres no deben faltar, porque son ricas en hierro, ácido fólico, fibra y otros minerales.
– Las aves y huevos, tampoco deben quedar fuera, porque ayudan a la producción de colágeno, aportan proteínas y el grupo de vitaminas B.
– Las carnes rojas también son importantes debido a su alto contenido de proteínas.
– Los pescados y mariscos, aportan proteínas, aceites, omega 3, grupo vitamina B y minerales.
– Y por último, los frutos secos sin sal además de frutas deshidratadas como los dátiles, las pasas y arándanos, también son buenos aliados contra la flacidez porque contienen aceites esenciales y glúcidos.
Actividad física contra la flacidez
Sumado a lo anterior, la especialista recomienda combinar la dieta antiflacidez con una buena rutina de ejercicios orientada a tonificar el cuerpo.
Revisa a continuación una nota que escribimos hace un tiempo, donde describimos cuáles son los ejercicios que necesitarás según la parte del cuerpo que quieras tonificar.
Ejercicios para tonificar: Consigue un “cuerpo playero” así de fácil
COMENTAR