Hoy se celebra el Día Mundial de la Salud y debido a la gran cantidad de personas que sufren de depresión, es que este año el enfoque está puesto en esta enfermedad, que según un informe de la Organización Mundial de la Salud (OMS), afecta a más de 300 millones de personas, cifra que se ha incrementado en más de un 18% entre 2005 y 2015.
Juan José Rojas, docente de Nutrición y Dietética de la Universidad del Pacífico dice que efectivamente “las patologías asociadas a trastornos del estado de ánimo han tomado gran importancia. La depresión ha aumentado significativamente en todos los grupos etarios y se asocia a un aumento en el riesgo de presentar demencias, incluido Alzheimer, en las etapas postreras de la vida. Esto es muy preocupante, ya que los cuadros depresivos repercuten enormemente sobre la salud del individuo mismo, así como también en la de su familia y de la sociedad entera”.
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Nutrición contra la depresión
Por esto, creeemos justo y necesario contarles sobre un factor que sube el ánimo y ayuda a aminorar los estados depresivos: la nutrición.
“Las terapias para enfrentar estos trastornos han apuntado hacia el enfoque biológico y social, pero si observamos la historia del hombre, siempre las enfermedades, incluidas las que comprometen el ánimo y las relaciones sociales, fueron abordadas culturalmente usando hierbas medicinales y alimentos. Hoy la evidencia científica ha avanzado significativamente en identificar nutrientes y su efecto sobre la salud mental. De este modo, algunos expertos en la materia plantean que la depresiones moderadas podrían ser tratadas sin tener que llegar a terapias farmacológicas, sino que sólo con un aumento en el consumo de ciertos nutrientes, además de mejorar los niveles de actividad física y de participación social”, asegura el experto.
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A lo anterior Rojas agrega que “los responsables de los distintos estados de ánimo de los individuos son ciertas moléculas de origen proteico llamadas aminoácidos, que una vez consumidos en la dieta humana son transformados en neurotransmisores responsables del buen ánimo, el optimismo y las ganas de vivir, pero también de los estados adversos que comprometen nuestra calidad de vida, como son la apatía, el desgano y la falta de interés y motivación”.
Alimentos sube ánimo
El nutricionista explica que además de consumir ciertos alimentos ricos en aminoácidos, también es necesario agregar a la dieta otro actor principal para transformarlos en neurotransmisores, que son los encargados del estado de ánimo del ser humano. ¿Cuáles son?
– Alimentos ricos en proteínas de origen animal (cárneos, lácteos, huevos).
– Frutas y verduras.
– Pescados de agua fría (como salmón, sardina y merluza).
– Cereales integrales derivados del trigo, como arroz, centeno y cebada.
– Chocolate.
– Vitaminas C, B1 y B3.
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“Para que los aminoácidos puedan ser transformados en neurotransmisores se requiere de una adecuada ingesta de ácido ascórbico, conocido como vitamina C. Es por esto que es recomendable consumir tres porciones de frutas y dos porciones de verduras al día, ya que favorecen, entre otros beneficios orgánicos, la síntesis de estas moléculas cerebrales”, explica. Y agrega que además de frutas, verduras y vitamina C, que el omega 3 tiene el poder de sacar a una persona de un cuadro depresivo moderado.
Por otra parte, “se ha observado también que las vitaminas del complejo B, específicamente la B1 y B3, regulan los niveles de glucosa o azúcar sanguínea, impidiendo las hipoglicemias o bajas bruscas de azúcar que se asocian a cambios en el estado de ánimo. Por ello, se recomienda consumir cereales integrales como derivados del trigo, arroz, centeno y cebada. Además, el chocolate tiene la particularidad de estimular la producción cerebral de endorfinas, que son un tipo de hormona que estimula los estados de ánimo positivos”, finaliza.
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