Son los invitados indeseados, pero que siempre se aparecen con la llegada de las bajas temperaturas del otoño e invierno. Gripes y resfríos son las enfermedades habituales que comienzan a presentarse en esta época y, por lo tanto, debemos tomar algunas medidas para evitar contagiarnos. Marcela Zapata, Jefa de Área de la Escuela de Salud de AIEP entrega sus recomendaciones para protegernos de estas enfermedades.
- Lavarse las manos: la mayoría de resfríos y gripes se contagian a través del contacto directo con personas u objetos infectados. Por ello es importante lavarse habitualmente las manos con jabón o alguna solución anti bacterial. Evite frotarse ojos y nariz si no se ha lavado sus manos. Es recomendable, además, llevar siempre un líquido o toallitas desinfectantes.
- Beber abundantes líquidos: nuestro cuerpo utiliza los líquidos acumulados para crear barreras que impiden el ingreso de microorganismos (mucosidad) o para ayudar en su expulsión (sudoración). Es debido a ello que debemos mantenernos constantemente hidratados, idealmente consumiendo jugos de naranja, zanahoria o tomates, todos ricos en vitaminas.
- Comer alimentos ricos en nutrientes y vitaminas: verduras de hoja verde, como espinacas o brócoli, y los cítricos aportarán la vitamina C necesaria para fortalecer su sistema inmunológico. El ajo y la cebolla contienen alicina, elemento que posee propiedades bactericidas, antivirales e inmunoestimulantes, por lo que consumirlos habitualmente puede evitar resfríos.
- Dormir y descansar lo suficiente: al dormir nuestro cerebro descansa y nuestro cuerpo puede usar este tiempo para combatir cualquier infección. Además, al descansar nos relajamos, disminuyendo los niveles de estrés a los que estamos expuestos diariamente.
- Hacer ejercicio: en 50% puede reducir las posibilidades de contraer un resfrío el practicar habitualmente ejercicio, ya que fortalece nuestro sistema inmunológico. Basta con caminar durante treinta minutos cinco días a la semana para protegernos. También se puede nadar, bailar, andar en bicicleta o incluso cortar el pasto.
- Ventilar habitaciones: ya sea en casa o en el lugar de trabajo o de estudio, se deben abrir las ventanas durante algunos minutos diariamente para permitir que el recambio de aire.
- Estornudar y toser sobre el brazo o un pañuelo: si usamos la mano para taparnos la boca al estornudar o toser, nuestros dedos quedarán cubiertos de gérmenes, provocando que todos los objetos que toquemos o personas a las que saludemos queden infectados.
- Evitar cambios bruscos de temperatura: abríguese bien cuando salga a la calle y provenga de espacios con una calefacción muy alta.
- Alejarse del cigarro: deje de fumar o evite el humo del cigarro, ya que éste irrita la garganta y puede agravar los síntomas de gripes o resfríos. Las estadísticas demuestran que los fumadores sufren resfríos más fuertes.
- No automedicarse: evitar consumir remedios por cuenta propia si se sospecha de un resfrío o una gripe. Es mejor consultar con un médico primero.
COMENTAR