Tranquila y relajada, Camila Vallejo saluda sonriente a las personas que la reconocen en la facultad. Viste una camisa café con puntos color calipso, un chaleco azul oscuro, jeans y zapatillas. Su aro en la nariz le da un aire entre rebeldía y femeneidad. La actual presidenta de la FECH asegura que nunca pensó que un liderazgo femenino a cargo de la organización estudiantil iba a causar tanto revuelo entre los estudiantes y los chilenos en general. “Obviamente pasa porque este es un espacio históricamente hegemonizado por los hombres y yo soy la segunda mujer en presidirlo, lo que genera un quiebre en una estructura históricamente patriarcal y machista”.
Tiene 23 años recién cumplidos y cursa quinto año de geografía. Militante de las Juventudes Comunistas, Camila Vallejo, aparte de destacar por ser la segunda presidenta mujer electa de la FECH, también es reconocida entre los chilenos por su belleza. “La mujer siendo que tiene muchísimo potencial, no ha sabido valorarse. El género femenino le entrega una mirada distinta al hombre, y se ve que eso nos cuesta valorarlo y potenciarlo. Existe el temor de que se nos juzgue de tontas o incapaces”, asegura.
Camila viene trabajando en política universitaria desde el año 2007. Un año más tarde creó junto a unos compañeros un colectivo de izquierda, una alianza entre las Juventudes Comunistas, el Movimiento Nueva Izquierda Universitaria e independientes. De todo este proceso, tomó la decisión de que tenía que ir como candidata a la presidencia de la FECH.
¿Qué impacto tiene un liderazgo femenino en la FECH, tradicional bastión de hombres?
De alguna manera ha sido muy positivo, la gente, sobre todo las mujeres ven en uno como una suerte como de esperanza. Muchas madres y abuelitas me dicen que es bueno que represente a la mujer, siendo que yo represento un colectivo, un proyecto político que no necesaria mente pertenece a la mujer. De todas formas, mi elección ha generado mucho impacto positivo por el hecho de ver a una imagen femenina liderando una organización tan importante como la FECH.
¿Piensas que tú liderazgo motive a nuevas mujeres a participar en este tipo de instancias?
Yo creo que la mujer tiene que empezar a valorarse y posicionarse como un sujeto real de transformación. Muchas mujeres ven en mí como una esperanza y ojalá que incentive a que exista una mayor participación. Creo que a la mujer se le han abierto más espacios, pero tienen que ser aún más, nosotras tenemos una perspectiva más femenina, más participativa, más integral y eso le puede beneficiar mucho a la política. Ahí hay un valor fundamental que las mujeres tenemos que saber aprovechar, para realmente generar cambios en la sociedad.
¿Qué opinas de las mujeres que vemos dirigiendo el país?
La solidaridad de género siempre está pero no voy a apoyar a alguien por ser líder mujer. En general las actuales líderes no responden a lo que yo creo que debe ser un buen líder sea hombre o mujer. No comparto sus posturas políticas ni ideología. Sí valoro el liderazgo de la ex Presidenta de la República, pero hubo proyectos que se realizaron durante su mandato, que tuvieron muchas falencias. Al mismo tiempo, creo que muchos problemas fueron por la Concertación, y ella le tocó responder ante eso. Uno no debe valorar por el género, sino por un proyecto político.
La cuenta pública y el rol de la FECH
Actualmente, a ojos de Camila Vallejo, la Fech ha recuperado un rol más activo en su desempeño con otras organizaciones sociales y políticas. Esto se manifiesta en que hace unos días realizaron una nueva marcha estudiantil, con la participación de la Confech, la Cut y la Anef entre otros organismos, la cual reunió a cuarenta mil personas.
¿Cuál es tú impresión de la cuenta pública que realizó el Presidente Sebastián Piñera en cuanto a educación?
Muy decepcionante, a nosotros se nos dijo el año pasado, que este sería el año de la educación superior y esperamos muy atentos, pero nunca hubo nada claro. Nosotros marcamos de alguna manera la pauta con nuestras movilizaciones y esperamos una respuesta en la cuenta pública, pero lamentablemente no se tomó el tema de la educación superior como un tema importante.
Obviamente esto genera frustración pero al mismo tiempo también mucha más fuerza para seguir defendiendo nuestras ideas. En las movilizaciones que hemos realizado se puede apreciar que también nos apoyan profesores, académicos, funcionarios públicos e incluso rectores. Entonces fue muy decepcionante que la máxima autoridad de nuestro país no diera cuenta en aquello.
¿Cómo ha cambiado la universidad para enfrentar los nuevos desafíos sociales, tecnológicos y laborales que enfrentan los jóvenes hoy?
La universidad ha tenido que responder y aumentar su productividad. Debe ponerse a la altura de las competencias que requiere no solamente el país, sino que también el mercado internacional y los costos que esto implica, los han tenido que asumir principalmente los estudiantes a través de las alzas de aranceles.
Sin embargo creo que la universidad ha sido muy responsable en abrir muchos programas o fondos concursables, para que los estudiantes tengan espacio para poder llevar a cabo sus proyectos artísticos, de innovación, económicos, entre otros. Hoy día vemos a compañeros de la facultad de arquitectura trabajando con ingeniería solar, con fondos propios de la universidad y eso es un avance importante respecto a las competencias tecnológicas que puede tener nuestro país. La universidad ha sabido responder a todas esas necesidades y ha dado los espacios para que los estudiantes sean parte de ese proceso de competencia.
A pesar de que Camila Vallejo comenzó su carrera política aproximadamente hace cuatro años, asegura que se encuentra enfocada en terminar su carrera de geografía y la presidencia de la FECH. Sin embargo no descarta la posibilidad, de que en caso de que su partido le pidiese asumir un rol importante, evaluarlo y tomar una decisión. Mientras tanto los chilenos la podrán ver a través de la pantalla chica como la principal líder del movimiento estudiantil.
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