Entre las enfermedades que afectan a la piel, la Rosácea, suele ser una de las más comunes. Según indican en la web de la Clínica Mayo, esta afección a la piel “causa enrojecimiento y vasos sanguíneos visibles en la cara“.
La prestigiosa clínica norteamericana también indica que esta enfermedad y sus síntomas, “pueden aparecer durante semanas o meses y luego desaparecer por un tiempo“, y que además, es muy fácil confundirla con el acné, otros problemas de la piel o la rubicundez natural.
Aunque la rosácea puede afectar a cualquier persona, los especialista advierten que “es más común en mujeres de mediana edad que tienen la piel clara“. Por otro lado, también informan que esta enfermedad no tiene cura, aunque su tratamiento sí puede controlar y reducir sus signos y síntomas.
Al respecto, el dermatólogo de Vidaintegra, Andrés Lehmann, explicó que “si bien es una condición crónica, si mantenemos los cuidados básicos podemos estar bien y tenerla medianamente controlada. Sin embargo, siempre va a estar la posibilidad de tener un episodio de enrojecimiento y/o inflamación si las condiciones lo permiten”.
¿Cómo evitar el enrojecimiento?
Daniela Saavedra, dermatóloga de Clínica Dávila, nos cuenta que para evitar de algún modo el color que nos provoca la rosácea, especialmente en verano, lo principal es que tengamos una buena limpieza facial, “ya sea con un jabón muy suave o una loción micelar para piel sensible, luego aplicar la crema, que es una crema indicada por un especialista que pueden comprar o se mandan a hacer”.
Sin embargo, si ya la piel está muy colorada y las cremas no están funcionando, “es ideal aplicar láser“. Hay que tener en cuenta eso si, que “estos procedimientos se hacen en invierno y hay más de un tipo de láser. Hay uno para evitar el enrojecimiento y hay otros que van a necesitar quemar unos vasos sanguíneos puntuales, entonces no es el mismo láser para las personas y no todos son aptos para hacerse láser, ya que podrían mancharse“, informó la especialista.
Tips para cuidar de la rosácea en verano
Aunque la rosácea se presenta durante todo el año, “el calor propio del verano es clave en el aumento de los casos en esta época“, asegura el doctor Lehmann.
Por esta razón es que la especialista de la Clínica Dávila también nos compartió algunos tips que podrían servirles a quienes estén sufriendo de esta condición:
– No exponerse a lugares muy caluroso o muy encerrados.
– Las duchas que sean cortas, con agua tibia y con la puerta un poco abierta.
– Andar por la sombra que no nos del sol directamente en la cara.
– Usar filtro solar, uno adecuado para que no arda la piel e indicado por un dermatólogo.
– Limpieza de la cara con un líquido especial. Hay lociones micelares que son especiales para pieles sensibles ya que no todas sirven porque existen cremas o lociones que podrían irritar la piel.
– Cuidar la alimentación, ya que la rosácea también se activa con algunos alimentos cálidos como por ejemplo los frutos secos, el alcohol, mayonesa, los aliños y condimentos.
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