Foto destacada: Pinterest.com/bellezapura
Todos debemos tener una rutina de belleza para nuestro rostro, pues se trata de cuidados que mejorarán el aspecto y salud de la piel.
Hoy la tecnología cosmética está tan avanzada que encontramos decenas de productos faciales que confunden a cualquiera. Desde cremas para los ojos, mascarillas y hasta sueros de vitaminas, en donde cada uno tiene su orden, momento y frecuencia de aplicación.
Con la ayuda de los profesionales de Medsthetik, te explicamos paso a paso cómo debe ser tu rutina diaria de belleza y en qué orden debes usarlos.
1. Limpiadores
Los consigues en crema, leches, espumas y hasta con micro-exfoliantes. Asegúrate de lavar tu cara todos los días, en especial por la noche.
2. Sueros faciales
Contienen nutrientes que son necesarios para una piel fresca y sana. Aplícalo después de lavar tu rostro y secarlo, ya que son absorbidos rápidamente y sirven como una “base” para el resto de tu rutina, la mayoría de ellos pueden ser usados día y noche. Usando estos sérum lo que haces es prolongar la hidratación y nutrición de la piel.
3. Contorno de ojos
Se recomienda utilizarla dos veces al día. Aplícalo con el dedo anular y da ligeros golpecitos hasta que se absorba completamente. La piel del contorno de ojo es la más delgada y siempre está seca, por lo que es necesario darle humectación.
4. Crema de noche
lo aconsejable es utilizar los tratamientos específicos por la noche, de acuerdo a las necesidades de cada una, como pueden ser las arrugas, acné o manchas. Aunque en algún caso sus componentes sean agresivos, tu piel se mantendrá humectada gracias a los pasos anteriores.
Cuidados esenciales para el día
Cremas hidratantes
Puedes encontrar cremas hidratantes para distintos tipos de piel, las que se encargarán de mantener tu piel humectada por horas. Recuerda siempre que la hidratación es el paso primordial para un rostro cuidado.
Protectores solares
Jamás debes dejarlos de lado, incluso si el día está nublado. Úsalo por la mañana, al menos 15 minutos antes de salir y extiéndelo hasta cuello, orejas y escote.
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