Mantener la piel limpia, hidratada y protegida del sol, son las recomendaciones necesarias para lucir un rostro de aspecto fresco y saludable ante el fuerte aumento de radiación ultravioleta que se registra en la temporada estival.
Ante la cercanía del verano el cuidado de la piel es un tema que debe preocuparnos a modo de evitar enfermedades relacionadas con la radiación solar, que cada vez se vuelve más dañina. La piel del rostro es una de las más relevantes a la hora de tomar precauciones debido a que está permanentemente expuesta a los rayos solares.
María Laura Cossio, dermatóloga de la Clínica Vespucio, señala que el primer paso es recuperar los daños que el cutis pueda haber sufrido a través de una limpieza para absorber mejor los nutrientes y componentes hidratantes. “Cada mañana y noche se debe limpiar la cara con una loción o gel de limpieza para preparar el rostro antes de aplicar una crema”, detalla.
Pese a que en verano aumenta la humedad del ambiente y la piel se deshidrata menos, es necesario usar una crema hidratante, época en la que se aconsejan las cremas de textura fluida, dice. También “hay que tener cuidado con abusar de los exfoliantes y jabones ya que pueden irritar y secar la piel”, argumenta.
Si la intención es realizarse un tratamiento más intensivo será necesario consultar con su dermatólogo, quien por ejemplo, podrá recomendar un tratamiento adecuado para cada tipo de piel, considerando que en los meses de verano aumenta la radiación ultravioleta y algunos principios activos pueden variar, explica.
Como recomendación oportuna ante los fuertes niveles de radiación, si te has realizado algún tratamiento despigmentante, limpieza de cutis o renovación de la piel, o incluso si la persona no se ha sometido a estos cuidados, “será fundamental, aplicar un fotoprotector reiteradamente a lo largo del día. En el caso del rostro, un protector con factor de protección solar sobre 30 será suficiente”, indica la dermatóloga.
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