A pesar de que el movimiento Body Positive hace su mejor esfuerzo para que las mujeres aceptemos nuestros cuerpos sin complejos y nos liberemos de los estereotipos, lo cierto es que en la práctica aún hay quienes necesitan someterse a algunos tratamientos estéticos para subir su autoestima.
En este sentido, existe un complejo que limita a muchas mujeres a mostrar libremente sus piernas, que tiene que ver con la flacidez y la celulitis que aparece en la piel de la zona de las rodillas.
Según explica Sandra Hernández, especialista en Medicina Estética de la Universidad de Córdoba, a Biut la rodilla es una de las articulaciones que tiene más movilidad en el cuerpo, en consecuencia es natural con con el paso del tiempo presente un desgaste.
“La piel de la rodilla está sometida a un estrés intenso todo el día durante la bipedestación. Adicionalmente otros factores ambientales como cambios de peso, ya sea por la carga que debe soportar la articulación o también el estiramiento que se produce; la falta de ejercicio y malos estilos de vida como tabaquismo, mala alimentación, foto envejecimiento, pueden contribuir antes de tiempo a la flacidez de las rodillas“, explica Hernández.
“En algunos casos puede existir el componente genético, que va desde síndromes de hiperlaxitud de los tejidos como la piel, articulaciones con alteraciones del colágeno y otras fibras del tejido conectivo. Estos pacientes tienen más flacidez en la piel y otros tejidos, y las rodillas pueden ser una de esas zonas con mayor predisposición”, advierte la especialista.
¿Cómo cuidar la piel de las rodillas?
La experta en Medicina Estética aclara que los factores externos o estilos de vida mejoran la piel de esa zona. Para esto aconseja:
– Mantener una alimentación sana y completa. Las proteínas de buena calidad son muy importantes en la dieta.
– Hacer ejercicio en forma periódica y en especial, fortalecer los músculos de la rodilla como el cuádriceps femoral, que es el músculo de cuatro segmentos que participa del movimiento de extensión de la rodilla.
– Limitar la exposición solar, ya que gatilla el envejecimiento de la piel de esa zona más rápido, produciendo una piel redundante e hiperlaxa.
– No al cigarro: El tabaquismo tiene alto impacto en la flacidez, envejecimiento acelerado y los problemas de cicatrización, por lo que dejar de fumar puede llegar a tener un impacto en la mejoría de la piel de hasta 5 a 10 años.
– Cuidar la piel, manteniendo su hidratación y textura con el uso de cremas con compuestos activos para ello.
“Cuando la flacidez de la rodilla aumenta normalmente se empieza a ser evidente entre los 45 a 50 años, se puede tratar con varias tecnologías en forma conjunta o solas. Generalmente en 1 a 2 sesiones“, revela Hernández.
¿Qué tratamiento mejoran la piel de las rodillas?
Sandra nos cuenta que para tratar la piel de las rodillas hay varias tecnologías disponibles, pero especificó que “la elección de la tecnología adecuada depende del diagnóstico en especial el grado de flacidez, grado de celulitis y grado de aumento del tejido graso“.
En cuanto a los tratamientos, algunos de ellos son los siguientes:
– El HIFU (Doublo/Ultherapy) es un Ultrasonido Focalizado de Alta Intensidad, que aprieta la piel en 3 a 5 profundidades, produciendo a muy elevadas temperaturas la contracción y aumento de las fibras del tejido conectivo, que se traduce en la reducción del tejido graso, mejoría de la celulitis y la flacidez.
– Los bioestimuladores como el ácido poliláctico (Sculptra), hidroxiapatita de calcio (Radiesse) estimulan la regeneración del tejido y el colágeno mejorando la celulitis y la flacidez.
– Hilos tensores reabsorbibles como los de Pdo, caprolactona o poliláctico, son una muy buena alternativa para mejorar la celulitis y la flacidez, pero no impacta en el tejido graso.
– La radiofrecuencia de alta intensidad (Thermage), ya que trabaja a altas temperaturas, mejora en especial la flacidez de la piel de las rodillas, pero no mejora la celulitis ni exceso de grasa.
– La mesoterapia dependiendo de los fármacos usados puede reducir la grasa, la celulitis y la flacidez.
¿En cuántas sesiones se logra un buen resultado?
La especialista aclara que el número de sesiones dependerá del tipo de tratamiento que te haz hecho. Por lo mismo, detalla que si te sometiste a HIFU (Doublo), “puede requerir una sola sesión si la flacidez, celulitis o la grasa es leve a moderada. En casos con más avanzado 2 a 3 sesiones separadas por 2 meses entre cada sesión. El efecto comienza a ser evidente desde el mes hasta los 6 meses, y dura más de 1 año”.
Por otro lado, si usaste Sculptra, bioestimuladores o hilos tensores como tratamiento, requerirán de “una a dos sesiones, separadas de 2 a 4 meses, y su efecto dura más de un año. Estás tres tecnologías pueden combinarse cuando se requiera para un mejor resultado”.
Como plus, parte de estos tratamientos también es posible usarlos en abdomen, entrepierna , muslos, glúteos, brazos, axila, cuello, escote, y cara, entre otros, indica Hernández.
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