Los estornudos y los ojos irritados son característicos de la primavera. Es que el incremento del polen en el aire suele afectar a un importante número de chilenos: sólo en Santiago cuatro de cada 10 personas, padece de rinitis alérgica y de ellos el 80% es por causa del polen.
Por lo que rinitis alérgica se convierte en el padecimiento más común de esta temporada estacional afectando de manera transversal a la población. El doctor Javier Mallol del Departamento de Medicina Respiratoria Infantil del Hospital El Pino y académico de la Facultad de Ciencias Médicas de la Universidad de Santiago de Chile, explica que los molestos síntomas se pueden aminorar a través de un tratamiento iniciado con antelación. “Existen varias estrategias para la prevención y tratamiento de la Rinitis Alérgica que incluyen medidas de control ambiental, evitar los agentes desencadenantes y, principalmente, el uso prolongado de corticoides nasales tópicos (aerosoles) y de antihistamínicos. Es por ello que el control médico especializado y el cumplimiento cabal del tratamiento, son sin duda los pilares para aminorar o evitar los molestos síntomas de los pacientes que sufren de Rinitis Alérgica”, dice Mallol.
Desde 1996 se realiza un monitoreo digital del polen y polvo en cuatro ciudades de Chile: Santiago, Valparaíso, Talca y Temuco, utilizando la máquina Burkard, la que tiene la capacidad de captar el volumen atmosférico de ambas partículas.
En la misma línea, el académico puntualiza que esta enfermedad tiene una alta prevalencia, señalando que se calcula que entre el 15-20% de la población mundial se ve afectada; sin embargo, y de acuerdo a lo demostrado recientemente por trabajos de investigación multicéntricos internacionales, es variable en distintas áreas.
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