Pamela (28) ya no tiene rabia. Esta periodista, a pesar de que su ex novio le fue infiel, fue capaz de perdonarlo tras el incidente. Y aunque hoy no están juntos, se reúnen cada cierto tiempo a tomar un café con sus actuales parejas.
Algo que puede ser raro, pero que hoy la ciencia empieza a comprobar: las mujeres perdonan más que los hombres, según un estudio realizado en la Universidad del País Vasco (UPV).
La investigación, hecha a 140 personas, divididas en 70 padres y 70 hijos entre los 17 y 60 años, ahonda en las diferencias etarias y de género, además del concepto de perdón de estos diferentes grupos.
Según los datos, publicados en la Revista Latinoamericana de Psicología, las mujeres demuestran “más capacidad de entender lo que ha ocurrido con el paso del tiempo y aprender de los propios errores”. Ellos, en cambio, tienen un rencor más prolongado en el tiempo tras alguna situación que amerite decir o esperar un perdón. “Una variable decisiva en la capacidad de perdonar es la empatía, y las mujeres tienen más capacidad empática que los varones”, señaló Carmen Maganto, coautora del estudio y profesora de la U. del País Vasco, a la agencia SINC.
Hombres y mujeres están de acuerdo que el perdón significa, en primer lugar, falta de rencor. Sin embargo, para las mujeres en segundo lugar significa “empatía o compresión” y, en tercer lugar, “reconciliación”. Mientras que para los hombres significa reconciliarse (en segundo lugar) y dejan en tercer lugar la asociación de perdón con olvido. En tanto, las diferencias más grandes entre los géneros se dan en el ítem “no sufrir por lo que te hicieron”: el (46,7% de las mujeres cree que es importante para perdonar, mientras que sólo el 18% de los hombres está de acuerdo.
Padres e hijos
El estudio también midió la capacidad de los padres e hijos para perdonar. ¿Quiénes son más rencorosos? Los hijos, concluye la investigación. Esto, porque los jóvenes consideran que el paso del tiempo es clave para el perdón. En tanto, a la hora de perdonar, los padres consideran razones como el arrepentimiento de sus hijos y la justicia por medio de la ley antes de tomar la decisión.
Algo que se puede aplicar a Chile, según la psicóloga Lucía Godoy, de la U. Andrés Bello, ya que los padres perdonan bastante, “sobre todo las madres. Los padres se muestran un poco menos permisivos, pero igual terminan perdonando a los hijos”.
El estudio indica que los padres que más han perdonado tienen una especie de entrenamiento mayor en el área y han aumentado su capacidad de disculpa. Además, entre más edad tenemos, más aprendemos a perdonar, tal como nuestros padres.
Según las autoras, la importancia de este trabajo es que puede facilitar dentro de las familias la educación del valor de perdonar, al identificar y conceptualizar las razones de ambos sexos para ello.
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