El ginecólogo de la Clínica Alemana, Rodrigo Sáez, afirmó que a las consultas de estos profesionales cada vez llegan más mujeres embarazadas obesas.
“Las mujeres están tendiendo a embarazarse a mayor edad, lo que conlleva, generalmente, a que tengan un índice de Masa Corporal (IMC) más elevado”, sostiene el doctor Sáez.
La segunda Encuesta Nacional de Salud estableció que 8,9 millones de chilenos tienen sobrepeso (67%) y 300 mil son obesos.
Según los expertos, muchos kilos extras pueden complicar un embarazo y afectar la fertilidad femenina. Además, las mujeres obesas tienen entre tres y cuatro veces más riesgo de tener un aborto en el primer trimestre o, más tarde, un feto muerto en el útero. Incluso es más difícil realizar los controles.
“Hacer un diagnóstico ecográfico adecuado de la anatomía fetal es todo un desafío, puesto que la calidad de las imágenes se deteriora progresivamente con el mayor tejido graso materno y se dificulta poder distinguir con precisión la anatomía del feto”, sostuvo el médico Sáez.
El feto puede verse afectado porque tienden a tener de dos a tres veces más riesgo de nacer con espina bífida, onfalocele y malformaciones cardíacas.
Para tener un embarazo y parto lo más sano y normal posible, lo ideal es que se busque bajar de peso antes de todo el proceso. Lo recomendable es no subir más de 13 kilos, pero en el caso de quienes padecen obesidad, la indicación es que suban hasta siete. También hay que evitar el sedentarismo y manejar adecuadamente patologías como la diabetes.
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