Estudio revela que el 34% de las mujeres de 122 países están inactivas físicamente frente al 28% de los hombres.
Soy una de las mujeres que se considera floja. En la época escolar, y porque era obligación, hacía deportes. En la Universidad tuve una que otra época de runner, ciclista y hasta yogi. Ya en el mundo laboral el tiempo escasea por lo que las horas sin hacer nada son un bien escaso. Y así, terminé siendo una persona casi inactiva, si no fuera por los cientos de escalones que subo y bajo a diario en el metro porque las escaleras mecánicas siempre van colapsadas. Sin embargo, siempre pensé que los hombres eran más flojos. ¿El por qué? No tengo idea, pero eso creía hasta ahora…
Un estudio dado a conocer por The Lancet hace algunos días examinó qué países tenían a los ciudadanos más activos y a los más flojos. El resultado más sombroso reveló que el 34% de las mujeres de 122 países están inactivas frente al 28% de los hombres. Y eso no es todo. A nivel mundial, el 31.1% de los adultos se considera físicamente inactivos lo que se define como menos de 30 minutos de actividad moderada 5 días a la semana o 20 minutos de actividad vigorosa tres veces a la semana. Sólo para las estadísticas, Malta tiene la mayor tasa de inactividad de sus residentes: 72%.
Si consideramos estos resultados, creo que en todos los avances que hemos hecho en la igualdad de géneros se nos olvidó el ítem salud. ¿Cómo es posible que nosotras seamos más flojas? Quizás para hacer deportes es verdad que no le ponemos mucho empeño. Pero para mí, la actividad física incluye dejar los pies en la calle por un buen dato, hacer el aseo mínimo una vez a la semana, correr para llegar a tiempo a todas partes y hasta andar con tacos.
Dato no menor es que si nosotras tenemos un CI más alto y más esperanza de vida que ellos. ¿Cómo es posible que haciendo más actividad física no puedan vivir más? Les dejo la duda…
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