Hace algunas décadas, la mayoría de las actividades cotidianas implicaban actividad física: subíamos las escaleras, realizábamos labores domésticas como limpiar la casa o lavar ropa, caminábamos para tomar micro o simplemente teníamos que pararnos para cambiar canal de TV. Hoy ese nivel de movimiento prácticamente no existe.
La vida moderna ha traído muchos beneficios que nos facilitan el trabajo, esto sumado a nuevas formas de ocio como la televisión, juegos de computador o redes sociales, que no requieren de mayor esfuerzo físico, según argumenta Erwin Núñez, académico de la Escuela de Nutrición y Dietética de la U. Andrés Bello.
Pero, ojo, el cuerpo humano está diseñado para estar en movimiento, por lo que la inactividad nos trae una serie de consecuencias negativas.
Se habla de sedentarismo cuando la actividad física realizada no alcanza la cantidad y frecuencia mínima estimada para mantenerse saludable. Es decir, 30 minutos de actividad física moderada al menos tres veces por semana, esta definición excluye las caminatas obligatorias a nuestro trabajo o lugar de estudios y las actividades realizadas durante nuestra jornada laboral o estudiantil.
“El sedentarismo es un factor de riesgo para múltiples enfermedades como las cardiovasculares, hipertensión, diabetes, obesidad y algunos tipos de cáncer como el de colon y de mama”, comenta. Los resultados de la Encuesta Nacional de Salud 2009-2010 muestran que el 88,6% de la población chilena es sedentaria, destacando que las mujeres son más sedentarias que los hombres, ya que el 92,9% de ellas lo son y los hombres alcanzan el 84%; en ambos casos la cifra es muy elevada.
Recomendaciones
El académico sostiene que aquellos que no hicieron actividad física desde el colegio, donde probablemente tuvieron apenas una clase por semana y más encima le hicieron el quite, deben incorporar el trabajo físico regular dentro de un estilo de vida saludable. Esto se traducirá en una mejor capacidad aeróbica, disminución de molestias físicas como malestares en las articulaciones, liberar tensiones, mejorar la resistencia y la fuerza de los músculos y ayuda a disminuir peso corporal, entre otros beneficios.
Erwin Núñez destaca la Estrategia Global contra la Obesidad (EGO) del Ministerio de Salud, que propone que sigamos las siguientes etapas para salir de la inactividad física en que se está inmersos:
- Camina como mínimo 30 minutos diarios
- Realiza ejercicios de estiramiento o elongación
- Opta por recrearte activamente
- Realiza pausas activas en el trabajo
- Realiza ejercicios 30 minutos tres veces por semana y adapta la intensidad a tu ritmo personal
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