La salud bucal hace referencia al buen funcionamiento de nuestra boca, especialmente de dientes y encías, según cuenta Patricia Calvache, directora de la clínica odontológica Dentimagen. Sobre esta parte de nuestro cuerpo existen varios mitos que esta especialista nos ayuda a confirmar o a desmentir.
Mito 1: Mujeres embarazadas no deben ir al dentista
¡Falso! Los cambios hormonales que surgen durante el periodo de gestación, hacen que enfermedades a las encías se hagan más frecuentes. “La gingivitis es muy común en mujeres que esperan bebés; la saliva se hace más ácida, lo que potencia la posibilidad de crear la enfermedad. Es recomendable que embarazadas hagan una visita al dentista alrededor del cuarto mes. De esta manera podrían evitarse intervenciones de urgencia”, nos cuenta la especialista.
Mito 2: Los dientes amarillos son menos resistentes que los blancos
¡Falso! Investigaciones aseguran que un diente amarillo puede, incluso, ser hasta más sano, que uno blanco y pulcro. “Con el paso de los años los cambios estructurales en la dentición, y la disminución del torrente sanguíneo, a través de la pulpa dental, puede hacer que éstos se vean más amarillos; lo que no necesariamente los hace menos sanos”, asegura Calvache.
Mito 3: El agua con gas puede disolver el esmalte dental
¡Verdadero! “El ácido carbónico que contiene este tipo de bebidas, podría dañar el esmalte dental. Si bien no se ha afirmado concretamente, que las aguas carbonatadas erosionan dientes y huesos, siempre es más sano consumir aquellas fluoradas, ya que ayudan a la reducción de caries y mejoran la salud bucal.”, asegura la experta.
Mito 4: El cepillo dental eléctrico no limpia en profundidad
¡Falso! Un cepillo eléctrico puede llegar a ser tres veces más efectivo que los clásicos. Todo depende de la técnica que tengamos para cepillarnos. “Los cepillos manuales se utilizan muchas veces en forma vertical, lo que facilita el desgaste de las encías y del cuello dental. Los eléctricos se mueven en dos o más direcciones, lo que los hace más efectivos, a la hora de profundizar la limpieza”, asegura la odontóloga.
Mito 5: El uso de hilo dental previene enfermedades cardiacas
¡Verdadero! El buen uso del hilo o seda dental no sólo previene enfermedades a las encías o bucales; su correcto y periódico uso podría incluso llegar a evitar problemas al corazón. “Las bacterias que se acumulan en los dientes y encías, por falta de aseo, pueden llegar al torrente sanguíneo y de ahí derivar al corazón, tapando las arterias que dejan fluir la sangre”, afirma. Variados estudios demuestran que las personas con problemas generados por deficiencia en la higiene bucal, son dos veces más propensos a problemas coronarios.
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